El director general de Trabajo, Cooperativismo y Economía Social, Román Ceballos, anunció ayer que la revisión del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de suspensión planteado por Ford para la factoría de Almussafes, prevista para finales de septiembre, «se demorará, dado que no cabe una revisión del primero sin tener en cuenta la situación que se genere derivada del segundo expediente».
Ceballos se reunió ayer con los representantes sindicales de Comisiones Obreras (CCOO) en el comité de empresa de Ford en Almussafes, para abordar la situación de la factoría valenciana ante los diversos Expedientes de Regulación de Empleo que le afectan, según indicaron fuentes de la Generalitat en un comunicado.
El director general garantizó a los representantes de Comisiones Obreras que el Consell de la Generalitat, a través de la Dirección General de Trabajo, Cooperativismo y Economía Social, como Autoridad Laboral de la Comunitat Valenciana, «está velando de forma constante por la defensa de los derechos de los trabajadores de Ford en Almussafes ante el proceso complicado que atraviesa la factoría por la reducción de la producción».
Por su parte, el sindicato mostró ante la dirección general su preocupación ante el ERE de suspensión que actualmente afecta a 294 trabajadores de la factoría, que debe ser revisado a finales de septiembre, y del nuevo ERE de extinción, en periodo de consultas, planteado por Ford que afectaría a 600 trabajadores motivado por la caída en la producción. Según CCOO, ninguno de los dos expedientes son necesarios para abordar esta reducción, indicaron las mismas fuentes.
El director general de Trabajo trasladó a los representantes sindicales que ambos expedientes están vinculados, ya que su justificación tiene como elemento principal la caída de ventas, y la consiguiente reducción de la producción. Asimismo, destacó que los propios trabajadores «son a la vez principales beneficiarios y actores de los beneficios obtenidos por la multinacional, al tratarse de la garantía fundamental del mantenimiento de la factoría Ford de Almussafes, y del empleo tanto directo como indirecto que genera».
Asimismo, animó a los representantes sindicales a «ejercer con responsabilidad su función como representantes de los trabajadores de forma objetiva».
«BUSCAR SOLUCIONES NEGOCIADAS»
También destacó que en estos momentos «es necesario primar puntos de encuentro con otras fuerzas sindicales representadas en el comité de empresa, y buscar soluciones negociadas que permitan garantizar el mayor número de empleos».
Román Ceballos recordó a los representantes de CCOO «la responsabilidad que tienen por su elección por parte del conjunto de trabajadores, en cuyo marco deben afrontar tres grandes retos, de los que depende el futuro de muchas familias, la solución del convenio colectivo; la solución del ERE de extinción y de suspensión, y el consecuente asentamiento de unas bases negociadas que permitan ante todo garantizar unos resultados de la empresa coherentes con el mantenimiento del máximo número de empleos», indicaron fuentes de la Generalitat.
Ante estos retos de futuro, según el director general, «es el momento de arrimar el hombro, dejar de lado las diferencias que, si bien, pueden tener sentido en campañas electorales, difícilmente van a ser entendidas y aceptadas por los trabajadores a quienes preocupa prioritariamente la garantía de su empleo».
Ceballos reivindicó que tanto empresa como comité «deben trabajar en la definición de un proyecto que contemple el desarrollo y la puesta en práctica de aquellas medidas tendentes a conciliar las garantías del empleo y la viabilidad de la empresa, puesto que es el momento de trabajar con seriedad, honestidad y generosidad por el bien de miles de familias que, de forma directa o indirecta, tienen vinculado su futuro a la compañía».
Desde la Generalitat, según Román Ceballos, «se va a continuar apoyando a la factoría de Ford Almussafes, porque ese esfuerzo tiene como destinatarios a miles de familias, y es una obligación legal y moral defender esos derechos, junto a los sindicatos». Así, insistió en que es necesario «buscar soluciones consensuadas para mantener hoy, y durante el tiempo que dure la crisis, el mayor número de puestos de trabajo».
Aseguró que las demandas sindicales «siempre son loables cuando defienden los intereses de sus representados, y en la defensa de los mismos, siempre contará con el respaldo de la Generalitat».
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