RRHH Digital CCOO quiere que la Junta de Castilla y León y el Ministerio de Industria, así como la empresa Renault, hagan públicas las ayudas que exige la multinacional francesa para su mantenimiento en Castilla y León y cuales son los apoyos económicos que están dispuestas a aportar las Administraciones públicas. Esta información es crucial, en opinión de CCOO, para hacer la cuenta real de lo que nos está costando a cada trabajador mantener abierta las fábricas de Renault en Castilla y León.
Para la Federación de Industria de CCOO y para la Unión de CCOO de Castilla y León la factura está siendo exigida por partida doble ya que financiamos el plan industrial de Renault con los impuestos de todos nosotros y nosotras, pero además, en una vuelta de tuerca más, la multinacional exige también que los trabajadores dejen de su bolsillo otra importante cantidad económica en forma de reducción de salarios y de incremento del tiempo de trabajo.
Como contrapartida a esta exigencia económica cada vez más descarnada Renault promete llevarnos a la sociedad de los países del Este o de Turquía. El Presidente de la multinacional en España, Jean Pierre Laurent, ha anunciado que quiere imponer los salarios de Eslovenia en Valladolid, pero no ha dicho como adaptar esta merma económica a los precios españoles, especialmente a los precios que Renault pone a los vehículos que comercializa en nuestro país y que son adquiridos en su mayoría por trabajadores y trabajadoras, muchos de ellos de su propia empresa.
Por estos motivos desde CCOO Castilla y León queremos mostrar nuestra más absoluto rechazo tanto al fondo de las declaraciones de Laurent como a las formas que nos recuerdan a actitudes del pasado en nuestro país o a dictaduras bananeras de otras latitudes. También nos parece importante que Renault ponga al frente de su empresa en España a personas con palabra que cumplan con lo pactado, es decir traer un nuevo modelo de coche a la fábrica de Valladolid, ya que de lo contrario la negociación colectiva se convertirá en algo que no queremos ni siquiera poner nombre.
Para CCOO el único objetivo es mantener los puestos de trabajo en la factoría de Valladolid y para ello daremos prueba, una vez más, de nuestra sobrada responsabilidad. Negociaremos hasta la extenuación el convenio colectivo y mantendremos la postura más flexible que nos sea posible, pero de ahí a pedirnos un retroceso en nuestra historia que dinamite todas las conquistas sociales de muchos años va un gran abismo. Así pues la responsabilidad que nos piden se la exigimos nosotros desde la Unión Sindical de CCOO Castilla y León y desde la Federación de Industria de CCOO tanto a la dirección en España de Renault como a las Administraciones Públicas porque también tienen la obligación de evitar la pérdida de puestos de trabajo e impedir que la ley de la selva domine en las relaciones laborales de nuestro país.
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