La Federación de Servicios a la Ciudadanía de CC.OO. expresó ayer su «total rechazo» a una posible congelación, para 2010, del salario de los más de 2,5 millones de empleados públicos con los que cuenta España.
El sindicato argumentó que sería un «grave error» que se planteara un incremento «cero» de los salarios públicos para el próximo año porque las administraciones y servicios públicos son un sector de referencia y por el mensaje que se lanzaría desde el Gobierno al conjunto del sistema productivo.
«Ello concluiría en un nuevo retroceso del consumo privado que agravaría aún más la crisis y conllevaría una mayor destrucción de empleo», avisó la Federación sindical.
CC.OO. recordó que el criterio que ha seguido el Gobierno durante los últimos años ha sido el de aprobar un incremento salarial para el conjunto de los empleados públicos no inferior a la previsión de inflación, o lo que es lo mismo, un crecimiento equivalente al que experimenten la pensiones en los Presupuestos Generales del Estado.
«Si éste ha venido siendo el criterio adoptado por el Gobierno cuando las previsiones de IPC eran del 2% y el IPC real del 4%, no sería de recibo cambiar los criterios cuando la inflación baja», alegó el sindicato.
El sindicato subrayó que defenderá ante el Gobierno este criterio y que planteará además el establecimiento de una cláusula de revisión salarial que permitiese, en el caso de que la inflación fuese superior a la prevista, efectuar el ajuste posterior, garantizando de este modo el mantenimiento del poder adquisitivo de los empleados públicos.
Los comentarios están cerrados.