«Facilitar la inserción laboral de la mujer en riesgo de exclusión social, ofreciendo programas de creación de empleo y prestando servicios de asesoramiento, formación y asistencia técnica» es el principal objetivo de ‘Viviendas transitorias para Mujeres’, una iniciativa impulsada por la Fundación Genus que, ahora en 2009, cuenta con la colaboración de la Diputación de Sevilla según un comunicado de la institución supramunicipal.
En concreto, con este programa se proporcionan las herramientas necesarias para lograr la independencia de la mujer, a través de la igualdad de oportunidades en el empleo. Para ello, entre otros muchos servicios, se les ofrece durante un año la posibilidad de acceder a una vivienda «para poder comenzar de nuevo», según el mandatario provincial, Fernando Rodríguez Villalobos.
Esta cooperación, entre la Fundación Genus y Diputación, se ha hecho material gracias a la firma de un convenio de colaboración entre el máximo responsable de la institución provincial y la presidenta de la entidad, Cristina Pavón Caballero. En este sentido, la institución intermunicipal aportará 24.000 euros para la prestación de servicios de asesoramiento laboral y formativo, así como, la atención psicopedagógica.
Más específicamente ‘Viviendas transitorias para Mujeres’ está dirigido, principalmente, a mujeres con algún tipo de discapacidad y a víctimas de violencia de género de la provincia de Sevilla. También, están incluidas mujeres inmigrantes, con escasa formación y con hijos a su cargo. En 2008, año de su puesta en marcha, este programa logró la inserción de 20 mujeres, el 75 por ciento en el sector servicios, y el 25 por ciento restante en la industria.
Actualmente, en lo relativo a las viviendas de acogida, la Fundación Genus cuenta con tres viviendas ubicadas en Sevilla capital, en el barrio de Pino Montano. Dos viviendas de cuatro dormitorios, cada una, ellas están destinadas a proporcionar alojamiento transitorio a 10 personas de forma simultánea. En el tercer piso propiedad de esta entidad se lleva a cabo la atención individualizada a cada usuaria del programa. Asimismo, en esta última vivienda se realizan los trabajos grupales y los programas de formación.
En próximas fechas se ampliarán los servicios ya que, tan sólo en el primer trimestre de 2009, se ha triplicado la demanda de usuarias para su inclusión en el programa. Así se prevé el acceso a nuevas instalaciones en Alcalá de Guadaíra y Carrión de los Céspedes.
Según muestra el balance del programa 2008, el perfil social de la usuaria destinataria responde a mujeres desempleadas de más de 45 años víctimas de violencia de género, con escasos recursos económicos y con hijos a su cargo. En el transcurso de 2008, ‘Viviendas transitorias’ atendió a 32 mujeres, el 50 por ciento de las usuarios con un menor a su cargo. Asimismo, de esa cantidad total de intervenciones, el 35 por ciento de las usuarias asistidas eran inmigrantes regularizadas.
Por otro lado en cuanto a la empleabilidad, la totalidad de las mujeres usuarias se encontraban desempleadas o con un trabajo precario. En lo relativo a su nivel académico, la mayoría de ellas contaban con estudios secundarios.
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