RRHH Digital. El verano es sinónimo de diversión en entornos naturales e instalaciones acuáticas, pero también es una época del año en la que debemos extremar las precauciones en cuanto a temperaturas, hidratación y conservación de los alimentos.
Golpes de calor, heridas, calambres, quemaduras y pequeños accidentes acuáticos son algunas de las lesiones más comunes del verano, que debemos intentar evitar para disfrutar de unas tranquilas vacaciones.
Y es que frente al calor y las actividades que realicemos durante el verano debemos tomar ciertas precauciones que nos permitan prevenir posibles accidentes. En el caso de que ocurran, es muy importante tener conocimientos de primeros auxilios con los que poder actuar en los primeros momentos de una emergencia.
Todo tipo de recomendaciones y técnicas necesarias para saber actuar frente a las lesiones más comunes del verano, se imparten en los cursos de primeros auxilios de la organización.
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