Casi 300 jóvenes tutelados por la Comunidad de Madrid consiguieron en 2008 un contrato laboral tras superar el periodo de formación previsto en el programa de inserción sociolaboral que la Consejería de Familia y Asuntos Sociales pone en marcha todos los años para muchachos tutelados por la Administración que están cercanos a cumplir la mayoría de edad y que presentan algún problema de integración.
El año pasado participaron en este itinerario 414 alumnos y el 70% firmaron un primer contrato laboral para iniciar una vida independiente. En este 2009, 246 jóvenes ya han participado en esta iniciativa.
La consejera de Familia y Asuntos Sociales, Engracia Hidalgo, aseguró que la Comunidad de Madrid «no cejará en el empeño de ayudar y amparar a todos los menores tutelados que necesiten de nuestro apoyo y orientación para buscar su camino en la vida».
Se trata de un programa de inserción sociolaboral cuyo principal objetivo es formar y orientar a los usuarios, darles las pautas necesarias para buscar trabajo y mediar con las empresas que puedan demandar algún empleo adaptado a la formación de los jóvenes. Además, los técnicos del proyecto les acompañan a las entrevistas de trabajo y, una vez conseguido el contrato, realizan su seguimiento.
La iniciativa, desarrollada por el Instituto Madrileño del Menor y la Familia, está dirigida a jóvenes de 17 años. Una vez cumplida la mayoría de edad, estos jóvenes pueden seguir contando con la ayuda, la orientación y el apoyo de la Administración regional.
Además de este programa, la Consejería de Familia y Asuntos Sociales también cuenta con itinerarios exclusivos de formación para jóvenes con dificultades sociales de entre 16 y 17 años, como los talleres formativos, de hostelería e informática, con un total de 155 plazas, o la formación socioeducativa y cultural de menores inmigrantes.
Este último programa, además de ofrecer las actividades propias de un centro de atención diurna, también forma a los chicos en matemáticas, lengua castellana, inmersión cultural y habilidades sociales, entre otras cuestiones. Además, cuenta con talleres de oficios en albañilería, fontanería y hostelería.
«La educación es un derecho que tienen todos los jóvenes en España y nuestra obligación, como Administración pública, es facilitar el acceso a todos los menores, especialmente a aquellos que más lo necesitan y mucho más si se encuentran bajo nuestra tutela», añadió Hidalgo.
La Comunidad de Madrid tiene 900 menores tutelados y 296 en situación de guarda residiendo en centros, de los que el 53,33% son adolescente de entre 13 y 18 años. En cuanto a recursos, dispone de 29 pisos tutelados, dos residencias y un programa de Vida Independiente, destinado a adolescentes y jóvenes que están bajo la protección de la Administración regional.
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