UGT confirmó ayer que presentará una denuncia ante la Fiscalía contra la patronal de la construcción por un supuesto delito social tras su negativa a aplicar la subida salarial del 3,5 por ciento correspondiente a 2009. Aseguró además que la paralización en las negociaciones del convenio supondrá la acumulación de una deuda de más de 15 millones de euros a los trabajadores del sector.
En total son unas 35.430 las personas que se dedican a la construcción en la provincia, a los que –según UGT— la patronal debe más de 13 millones de euros en concepto de atrasos, que se unen a los casi tres millones de euros correspondientes al dinero que los empresarios «se han ahorrado» en cotizaciones a la Seguridad Social.
Para el secretario general de UGT-Granada, Mariano Campos, esta actitud supone un «atraco a los bolsillos de los trabajadores y un autentico delito social» y acusó a la patronal de querer «marear la perdiz» con sus numerosas consultas sobre el IPC previsto, para «no pagar lo firmado».
Por su parte, el secretario general de MCA-UGT Granada, Francisco Ruiz-Ruano, añadió que la negativa de los empresarios a aplicar la subida salarial fijada en el convenio provincial de la construcción obedece a una actitud «prepotente, cínica e irresponsable», que rompe el principio de buena fe y confianza que deben presidir cualquier proceso negociador.
Recordó que el convenio de la construcción ya ha sido firmado en más de 30 provincias en toda España, así como en la mayoría de las comunidades autónomas, «y en todas y cada una de ellas se ha pactado la subida salarial del 3,5 por ciento para este año».
Ambos dirigentes sindicales hicieron un llamamiento a los trabajadores del sector de la construcción de Granada para que exijan a los empresarios hasta el último céntimo de los atrasos que desde enero de este año han dejado de percibir, para lo que han puesto a su disposición los servicios jurídicos deUGT.
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