Los trabajadores del grupo estadounidense General Motors han ratificado el acuerdo alcanzado entre la dirección de la compañía y el sindicato United Auto Workers (UAW) para la modificación del convenio colectivo y la eliminación de las desventajas competitivas de que adolece la empresa respecto a sus competidores.
El acuerdo supone modificar el convenio colectivo suscrito entre las partes en el año 2007, lo que afectará a las condiciones laborales de 54.000 trabajadores de General Motors distribuidos en 46 instalaciones industriales de Estados Unidos.
Los principales aspectos que contempla esta modificación del convenio son la reducción de los costes y la generación de ahorro conforme a lo establecido en el plan de viabilidad de General Motors, que podrá así eliminar las diferencias de salarios y jubilaciones en relación con sus competidores.
Asimismo, incluye cambios en el fondo para prestaciones sanitarias de los trabajadores jubilados (VEBA por sus siglas en inglés), y permite la transformación de una fábrica estadounidense para la producción exclusiva de coches pequeños y eficientes.
La vicepresidenta de Relaciones Laborales de General Motors, Diana Tremblay, expresó su agradecimiento a los trabajadores y ex empleados de la compañía. «Sus sacrificios permitirán a General Motors convertirse en una empresa más fuerte y más viable», añadió.
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