El portavoz parlamentario del PSOE, José Antonio Alonso, trasladó ayer a los sindicatos españoles en General Motors (GM) el compromiso del Gobierno socialista y del ministro de Industria, Miguel Sebastián, de «hacer todo lo que esté en su mano y arrimar el hombro» para mantener la «mayor capacidad de producción» en la planta de Figueruelas (Zaragoza) que genera cerca de 35.000 empleos en la región, entre empleados, proveedores y trabajadores indirectos.
Durante el encuentro que mantuvo con los representantes sindicales que han asistido a los encuentros celebradas en Alemania con el Comité Europeo de GM, Alonso aseguró que Sebastián y el resto del Ejecutivo implicado en la negociaciones de estos días les mantendrá puntualmente informados sobre sus contactos con otros países europeos implicados.
Esta misma tarde la Comisión Europea convocó una nueva reunión de los ministros de Economía y de Industria de la UE para discutir la venta del fabricante de coches Opel, filial de General Motors, si bien todavía no se ha fijado una fecha para la misma.
«Sabemos que tenemos una planta muy competitiva y viable en un sector estratégico para el Gobierno y los socialistas en su conjunto», aseguró Alonso en declaraciones a los periodistas tras la reunión, en la que se abordó la formación de un acuerdo fiduciario que permita lograr financiación puente por parte del Gobierno alemán, al que podrían sumarse otros Ejecutivos europeos, como el español.
AYUDAS A FIGUERUELAS
Este acuerdo se ha visto facilitado por la decisión de General Motors de reorganizar sus activos de las marcas Opel y Vauxhall Europa bajo la gestión de la filial alemana Adam Opel.
En este sentido, el secretario general de la sección sindical de UGT en GM, Pedro Bona, explicó que Alemania «ha dejado claro» a los otros países que deben aportar una «cantidad equivalente» a la suya en los próximos tres o cuatro meses, hasta que se decida el socio inversor de la nueva Opel Europa. «Tengo constancia de que el Gobierno español ha estado en continuas consultas con GM y el Gobierno alemán pero no puedo ir más allá», señaló.
No obstante, avanzó que el Ejecutivo español «está dispuesto» a aportar para la planta de Figueruelas en la línea del aval de 200 millones de euros concedido por la comunidad de Aragón, si bien esta posibilidad depende de la presentación de un proyecto industrial.
CC.OO PIDE QUE ESPAÑA SIRVA DE CONTRAPUNTO A ALEMANIA
Por su parte, el secretario general de la Federación Siderominera de CC.OO, Salvador Salas, explicó que si no se dan los pasos para la creación de la sociedad fiduciaria, Opel podría llegar a una situación de bancarrota y destacó que «dada la complejidad de toda la situación», la elección del socio inversor podría retrasarse hasta final de año.
En este sentido, pidió al Gobierno español que se implique «más directamente» en la operación para «servir de contrapunto» a las actuaciones del Ejecutivo alemán. «No nos podemos quedar al margen», advirtió.
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