El presidente de la Confedereción de Empresarios de Madrid (CEIM), Arturo Fernández, aseguró hoy que el camino para salir de la crisis pasa por aplicar la austeridad en las Administraciones Públicas, apoyar el trabajo, emprender una serie de reformas estructurales, como la del mercado laboral, y bajar los impuestos de sociedades, IRPF y cotizaciones sociales.
Fernández hizo estas consideraciones durante su intervención en la Asamblea General de CEIM 2009, donde manifestó que la economía se está deteriorando a «un ritmo más intenso y preocupante de lo que anunciaban los peores pronósticos» y que ya ha llevado a más de 4 millones de personas a engrosar las listas del paro.
Por ello, explicó que para reactivar la actividad económica es necesario poner en marcha una serie de medidas, entre las que citó sanear al sistema financiero, mantener la austeridad en las Administraciones Públicas, bajar el impuesto de sociedades al 12,5 por ciento, el IRPF y las cotizaciones sociales e iniciar reformas estructurales para mejorar la competitividad de las empresas.
En este último punto, matizó que es imprescindible eliminar del mercado español las trabas autonómicas o municipales que «se han desarrollado en exceso», mejorar la regulación de los sectores básicos, la energía las comunicaciones y los servicios para aumentar la competencia y abaratar los costes de producción de las empresas, y reformar el mercado de trabajo.
NUEVAS FORMAS DE CONTRATACION
Así, recordó que CEIM y CEOE apuestan por nuevas formas de contratación, como el contrato indefinido, que, a su juicio, puede ser «un buen instrumento de creación de empleo que acerca a la regulación laboral de la mayoría de los países desarrollados». Fernández aprovechó la ocasión para preguntarse las razones por las que los sindicatos no apoyan esta propuesta.
«No entendemos que los sindicatos se opongan frontalmente a sentarse a hablar sobre nuevas formas para crear empleo y que la única respuesta que hemos tenido de ellos ha sido decir que los empresarios quieren abaratar el despido», manifestó, al tiempo que aclaró que este punto de vista es erróneo porque las patronales reconocen los derechos de los trabajadores en activo.
El presidente de CEIM mantuvo que en momentos como los actuales es necesario que los trabajadores, los sindicatos, los empresarios, instituciones financieras, administraciones públicas y partidos políticos «deben estar del mismo lado».
Por ello, criticó la actitud de los sindicatos por rechazar las propuestas de los empresarios para crear empleo «cuando la única solución que han planteado es la de dar más subvenciones a los parados» y sostuvo que el contrato que ellos proponen dará la oportunidad a 4 millones de parados de incorporarse al mercado laboral. «Los sindicatos deben asumir su cuota de responsabilidad, tienen que dejar de ser parte del problema para ser parte de la solución», apostilló.
LOS SUBSIDIOS, UNA AYUDA PASAJERA
Fernández insistió en que los subsidios por desempleo «son una ayuda pasajera y no pueden convertirse en el objetivo de la política económica, a no ser que el Gobierno quiera rendirse y tirar la toalla». Frente a ello, abogó por diseñar medidas que favorezcan una mayor competitividad de los productos y servicios españoles en el extranjero, definir una política de medio ambiente, agua y energía y reformar la educación a todos los niveles.
También apostó por buscar los estímulos que requiere la formación, al investigación y la innovación para lograr una mayor implicación de la iniciativa privada en este ámbito, del mismo modo que confió en la liberalización de estos servicios y en el fomento de la gestión público-privada de infraestructuras y servicios.
Asimismo, se mostró partidario de mejorar la Justicia, la neutralidad t la eficacia de los órganos reguladores y de acometer una reforma general de las Administraciones Públicas
Tras exponer sus propuestas, el presidente de la CEIM explicó que la responsabilidad de los empresarios es crear riqueza para el Estado, las comunidades autónomas y los ayuntamientos con la que fomentar el bienestar social. «La mejor manera de enfrentarnos a las crisis consiste en que cada uno se centre en lo que le corresponda, en recuperar el crecimiento de la economía, cortar el paro y la destrucción de empresas que nos ha costado crear y mantener», agregó.
Acto seguido, dio un impulso a todos los empresarios madrileños al decir que conforman «el mejor tejido empresarial» de España y que, con su ayuda, el país va a salir de la crisis, al tiempo que indicó que todo esto será posible gracias a una Administración regional «sensible para adoptar medidas de austeridad, de impulso económico y de apoyo a los emprendedores».
Los comentarios están cerrados.