El responsable de Ganadería de ASAJA de Cuenca, Vicente Caja, asegura que algunas explotaciones ganaderas de la provincia de Cuenca están teniendo que cerrar por falta de mano de obra. En tiempos de crisis, en los que el número de desempleados ha aumentado en casi todos los sectores, siguen faltando pastores para hacerse cargo de los rebaños, especialmente de ganado ovino y caprino.
En declaraciones a Europa Press, Caja afirmó recientemente que ser pastor es una profesión muy dura, «más que una profesión o un oficio, es una forma de vida. Exige que estés pendiente casi todas las horas del día, y todos los días del año, y es difícil encontrar gente dispuesta a ello».
Asimismo, reconoció que los salarios no son muy altos porque hablamos de un sector en declive «y cuando un sector así se encuentra en decadencia a causa de los precios, no resulta rentable».
Caja aseguró que hasta hace poco tiempo recibían en ASAJA consultas de trabajadores que querían emplearse como pastores; sin embargo la tendencia ha cambiado y ahora las peticiones que reciben son de los propietarios de las explotaciones buscando mano de obra, ante el riesgo, que en muchos casos se ha concretado, de tener que cerrar por falta de mano de obra.
La mayoría de explotaciones de la provincia son familiares con pocos empleados. «Las explotaciones familiares suelen ocuparse los propios miembros de la familia, o tener como mucho un pastor, si lo combinan con la agricultura. Sin embargo, en las ganaderías más grandes de la Mancha de Cuenca, donde está el ganado de ordeño, sí que se hace necesario contratar pastores, y ahora les cuesta cubrir las vacantes».
Por otro lado, lamentó «lo que está ocurriendo con la ganadería, porque realiza una labor medioambiental indispensable para nuestros campos, que no se puede conseguir de ningún otro modo, y es una lástima que no tenga más apoyo por parte de las administraciones».
Asimismo, Caja hizo hincapié en la falta de profesionalidad que existe en el sector, «porque la formación y el aprendizaje se consigue con la práctica».
Como apuntó el responsable de Ganadería de ASAJA, apenas funcionan centros de formación, como la Escuela de Pastores que existe en el País Vasco, en Oñate (Guipúzcoa) en la que se da una formación completa a los aspirantes, a quienes se les enseña el ciclo completo, desde el cuidado del ganado, a la elaboración de quesos o la comercialización de los productos, que comenzó a funcionar hace 12 años.
Los comentarios están cerrados.