Celestino Corbacho, ministro de Trabajo e Inmigración, dijo hoy que «no tiene ningún plan B» alternativo al diálogo social porque «no contempla» el fracaso del mismo, ya que todas las partes han mostrado su voluntad de seguir con él. El ministro hizó esta declaración durante su comparecencia en la Comisión de Trabajo del Congreso de los Diputados para hablar de la evolución del proceso del diálogo social iniciado el en julio de 2008.
A pesar del reciente decreto ley sobre medidas para el empleo, aprobado por el Gobierno sin la participación de patronal y sindicatos, y cuya convalidación se debatirá el jueves en el congreso, Corbacho afirmó que no aprobará ninguna reforma laboral que no haya pasado previamente por el diálogo con empresarios y sindicatos. Según Corbacho, «el diálogo social sigue vivo y con muchas de sus tareas por hacer».
En relación con el decreto ley sobre medidas para el empleo, Corbacho se mostró confiado en su convalidación por el Congreso, aunque habrá que discutir si se tramita como proyecto de Ley o no.
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