Mañana se reúne la Comisión del Diálogo Social

Gobierno, sindicatos y empresarios se reunirán mañana en el marco de la Comisión de Seguimiento del Diálogo Social para tratar de cerrar un acuerdo de medidas urgentes que mejore la protección por desempleo y favorezca la creación de empleo.

La reunión, que será por la mañana, tiene mucha importancia, pues en ella podría despejarse el camino para que la CEOE dé el ‘sí quiero’ al acuerdo, tras las dudas surgidas en las últimas semanas sobre su participación o no en el mismo.

A la CEOE no le basta con las medidas puestas hasta ahora sobre la mesa y sigue insistiendo en la necesidad de acometer una reforma laboral, que abarate los costes del despido improcedente a través de la creación de un nuevo contrato, llamado ‘contrato de crisis’, que implicaría una indemnización por despido de 20 días por año trabajado, frente a los 33 y 45 días existentes en los contratos indefinidos de fomento del empleo y de carácter ordinario, respectivamente.

Fuentes sindicales consultadas por Europa Press denunciaron que la patronal se está cerrando en banda y que sigue aferrada a su programa de máximos para no apoyar al acuerdo social, confiándolo todo a una carta: que el Gobierno actúe si no hay acuerdo y tome las medidas que juzgue necesarias.

El secretario general de CC.OO., Ignacio Fernández Toxo, ya se ha pronunciado sobre la posibilidad de que la CEOE se abstenga de dar su apoyo al acuerdo social. Toxo no quiere que los empresarios se queden al margen del pacto, a pesar de que son muchas las diferencias que les separan.

Pero los sindicatos no son los únicos que han estado ‘leyendo la cartilla’ a la patronal. El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, almorzó con el Comité Ejecutivo de la CEOE el pasado viernes y, además de tratar sobre medidas para mejorar la financiación y liquidez de las empresas, parece que dio un ‘tirón de orejas’ a los empresarios para que se avengan a firmar acuerdos en el diálogo social.

MEDIDAS

Lo cierto es que sobre la mesa ya hay varias propuestas y varios documentos circulando, que una vez depurados podrían ir al Consejo de Ministros del viernes 6 de marzo, quizá no para su aprobación (algunas medidas requerirán cambios legales), pero al menos sí para su análisis.

Entre las medidas que se barajan se encuentra la de eliminar los periodos de espera entre el fin de la prestación contributiva por desempleo y el cobro del subsidio asistencial, y facilitar la contratación indefinida de trabajadores en paro que cobren prestación (tanto contributiva como asistencial) para utilizarla como una bonificación dirigida al empresario que contrate a estos trabajadores.

Así, de aprobarse la medida tal y como está actualmente diseñada, la empresa que contrate a estos trabajadores podrá bonificarse el 100% de la cuota empresarial a la Seguridad Social, hasta alcanzar un máximo equivalente al importe de la prestación que el parado tuviera pendiente de recibir a la fecha del contrato, con un límite para la bonificación de tres años y con la obligación de mantener en el empleo al trabajador contratado durante al menos un año (si le despide antes, la empresa tendrá que devolver las bonificaciones de las que se hubiera beneficiado).

Otra de las iniciativas que parece que finalmente saldrá adelante es la de reponer, con límites, las prestaciones por desempleo a los trabajadores a los que se les haya suspendido el contrato de trabajo por causa de un expediente de regulación de empleo (ERE) de suspensión temporal que deviene en definitivo.

También habrá mejoras para aquellos trabajadores afectados por ERE de reducción de jornada y se favorecerá el mantenimiento del empleo mediante la concesión de aplazamientos en los pagos empresariales a la Seguridad Social.

En materia de contratación a tiempo parcial, se plantean bonificaciones para fomentar esta figura contractual, escasamente utilizada en España. Dicha bonificación será un 30% superior a la jornada pactada en el contrato, sin que en ningún caso pueda superarse el 100%. De hecho, para que el contrato reciba la totalidad de la bonificación, la jornada del contrato a tiempo parcial deberá ser equivalente al 70% de la jornada completa.

En cualquier caso, algún sindicato se ha mostrado en contra de incentivar los contratos a tiempo parcial, alegando que éstos van ligados a bajos salarios y a la necesidad de buscar segundos empleos.