El ex ministro de Trabajo y Asuntos Sociales Jesús Caldera celebró hoy que el titular de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, "haya tenido la sensibilidad de aclarar" que no habrá "cupos generalizados" de detención de inmigrantes, al tiempo que tachó de "crítica desproporcionada" la reacción del PP en este asunto.
Caldera destacó que Rubalcaba ha "corregido" la orden y haya dejado claro que su "intención es controlar o eliminar acciones delictivas" relacionadas con mafias o delincuencia y "que no se van a asignar unos cupos generalizados a ciudadanos por el simple hecho de ser inmigrantes que carecen de documentación, porque ese es un ilícito puramente administrativo".
"Ayer le oí decir que la prioridad está relacionada con las personas que cometen delitos y en modo alguno con la asignación de cupos que pueden entenderse como un rechazo a derechos de ciudadanía", añadió, durante su participación en un encuentro informativo organizado por Aragonex.
Además, el actual secretario de Ideas y Programas del PSOE advirtió al PP de que "no es aceptable" que opten por una "crítica desproporcionada" al Gobierno quienes han utilizado la inmigración "para deteriorar la convivencia" y han "estado permanentemente exigiendo el cierre del modelo, el que no llegara nadie a España, que fueran todos expulsados".
En este punto, aprovechó para defender la regularización de unos 700.000 inmigrantes que llevó a cabo cuando era ministro, en colaboración "con los sindicatos y con los empresarios". "¿Qué hubiéramos hecho con 700.000 personas que estaban trabajando y aportando riqueza? Que me digan qué hubiéramos hecho. ¿Expulsar a los 700.000? ¿Podíamos hacerlo? ¿Teníamos capacidad para ello? ¿Habría sido justo?", se preguntó.
En esta línea, defendió que ya en ese momento se elaboró un modelo que sirve para las épocas de "prosperidad" y para las de "crisis", haciendo que el mecanismo estabilizador sea el mercado laboral.
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