Braceros mexicanos que trabajaron por invitación en Estados Unidos durante la Segunda Guerra Mundial llegaron a un acuerdo sin precedente que les permitirá recibir el dinero que les fue retenido de sus salarios como fondo de retiro y que fue enviado al gobierno mexicano.
Un juez de San Francisco dio autorización final al acuerdo por varios millones de dólares el viernes por la tarde. Ya se habían llegado a algunos acuerdos preliminares en octubre.
Un total de 6.100 ex braceros, con residencia en en Estados Unidos o sus familiares podrán cobrar aproximadamente 3.500 dólares en salarios perdidos del gobierno mexicano.
Miles de braceros trabajaron en los campos y en la construcción de ferrocarriles en Estados Unidos entre 1942 y 1964 según un acuerdo entre ambos países.
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