Catalunya registró un total de 808 Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) en 2008 -sumando los de rescisión de contratos, los de suspensión temporal y los de reducción de jornada laboral- que afectaron a 29.267 trabajadores, la mitad por expedientes temporales.
Esta cifra de afectados es casi cuatro veces superior a la registrada en 2007, cuando el número de afectados se situó en 7.728 trabajadores. Asimismo, el número de expedientes presentados en conjunto en 2008 se incrementó un 72% respecto a los 468 expedientes del año anterior, según datos de la Conselleria de Trabajo facilitados a Europa Press.
Los expedientes de extinción de empleo aprobados sumaron 466 y afectaron a 8.842 personas en la comunidad, un 39,8% más que en el año anterior, cuando los despedidos en ERE fueron 6.324 personas.
A pesar de que el número de expedientes de suspensión temporal de empleo fue menor -se presentaron 286 frente a los 466 de extinción-, la afectación de trabajadores se disparó hasta alcanzar los 19.532 – en 2007 sólo fueron 1.344 afectados por ERE temporal-, principalmente por la crisis del sector del automóvil.
Los afectados por ERE tanto de extinción como de suspensión -que pasan a cobrar el paro durante el tiempo de vigencia del expediente- representaron una parte relativamente pequeña si se observa que el incremento de parados en Catalunya en el último año ascendió a 204.000 personas, puesto que la pérdida de empleos en determinados sectores no es mayoritariamente por la vía del expediente.
Este dato queda reflejado en las cifras del expedientes aprobados por el Govern en diciembre del pasado año, que muestran que, de los 11.215 trabajadores afectados por ERE de cualquier tipo, 10.250 pertenecían al sector de la industria, mientras que 699 eran de servicios, 232 de la construcción y 34 de agricultura.
De nuevo en el último mes de 2008, la mayor parte de afectados lo fueron por expedientes de suspensión de empleo -un total de 9.067- y en su mayoría responden al sector de la industria automovilística. En diciembre, se aprobaron los ERE temporales de fabricantes como Nissan y Seat en Catalunya.
En el mismo periodo se presentaron 58 ERE de rescisión de contratos, que supusieron la pérdida de 1.620 puestos de trabajo en la comunidad. La afectación fue sobre todo en la industria, que registró la pérdida de 1.056 empleos, seguida de los servicios, con 338; la construcción, con 195, y la agricultura con 31.
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