El Departamento de Empleo del Gobierno Vasco ha rechazado el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) presentado por la dirección de Cegasa, que afecta a 217 trabajadores de la planta de Vitoria, informó el ejecutivo autónomo.
El consejero de Empleo, Joseba Azkarraga (EA), señaló que la no autorización del ERE ha sido "fruto del análisis riguroso", y apostó por abrir una nueva negociación, mientras la empresa achacó el rechazo a "motivos electorales y no económicos ni objetivos", ante la proximidad de los comicios vascos del 1 de marzo.
El ERE planteado por la fábrica de pilas ante la autoridad laboral vasca afectaba a 217 operarios a través de prejubilaciones (95 trabajadores mayores de 54 años) y bajas incentivadas (122 personas).
En un comunicado, el consejero Azkarraga defendió que el rechazo se ha basado en "un principio de legalidad en el que se han tenido en cuenta las alegaciones de la empresa, del comité y el informe de la inspección".
Azkarraga afirmó que la resolución negativa "no implica el no reconocimiento de una situación delicada en la viabilidad económica de la empresa", sino que hay una "falta de proporcionalidad entre la situación y las medidas pretendidas".
"Es decir, en una situación que afecta a Cegasa, las medidas iban encaminadas únicamente al cierre definitivo de la actividad. Este Departamento entiende que, para una decisión de esas características, es necesario un periodo más largo de observación, en el queden perfectamente distinguidas las razones provocadas por la crisis de demanda, en un momento coyuntural como el que estamos viviendo en éste y otros sectores, de otras que pudieran considerarse como irreversibles".
En opinión del consejero, es necesario que a partir de este momento "se abra un nuevo proceso de negociación transparente, que lleve a la búsqueda de soluciones de los problemas que se derivan en Cegasa".
Azkarraga también aseguró que en todo este proceso "ha estado planeando la influencia que las entidades financieras han podido tener en la radicalidad de la solución planteada por la empresa. Por ello, pedimos a las entidades financieras que asuman su papel y su responsabilidad en un momento de crisis económica como el actual".
Por su parte, tras conocer la denegación del ERE, la dirección de Cegasa, que acumula más de 22,5 millones de euros de pérdidas, ha reiterado que "la fabricación de pilas en Vitoria es inviable y el cierre de esta actividad es inevitable".
Para la empresa, la denegación "se ha tomado en base a criterios electorales y no de defensa de la empresa ni de los puestos de trabajo, y traerá gravísimas consecuencias para todo el grupo".
En los próximos días la compañía analizará la situación y las medidas jurídicas y decisiones empresariales que esta denegación conllevará.
Además, la dirección ha criticado "la actitud del comité de empresa y de los sindicatos, que se han negado a negociar durante dos meses".
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