El 78% de las empresas españolas pronostica que su facturación no aumentará (35%) o decrecerá (43%) en el 2009, lo que sitúa a España en la posición más pesimista respecto a la Unión Europea, según el estudio International Business Report (IBR), elaborado por la compañía Grant Thornton.
Según el socio director de la firma Audihispana Grant Thornton, José María Fernández Ulloa, el freno de la demanda interna, ligado a la rápida destrucción de empleo, a la restricción del crédito y a la caída de la confianza empresarial, junto con unas exportaciones estancadas por la debilidad de los mercados internacionales, provocan que las expectativas de facturación de las empresas se vean inevitablemente reducidas.
Asimismo, el estudio refleja que los empresarios españoles están cada vez más preocupados por el desplome de la demanda interna, tras un periodo en que ésta venía experimentado fuertes incrementos, con unos índices anuales del 3,7% en 2006 y del 4,7% en 2007.
El 53% de las empresas espera una reducción de sus beneficios en el 2009 y un 23% adicional cree que éstos se estancarán, datos que vuelven a colocar a España en la última posición entre los miembros de la Unión Europea, donde un 38% de las empresas pronostica un descenso en sus beneficios, frente a un 25% que prevé un incremento.
Además, el estudio subraya que las expectativas de empresarios y directivos españoles sobre facturación y beneficios de sus empresas en 2009 son "notablemente" más pesimistas que las registradas en la crisis sufrida en 1993.
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