La Asociación de la Prensa de Cantabria reclama al Gobierno de esta comunidad que mire "con lupa" los Expedientes de Regulación de Empleo (EREs) que se presenten en el sector, para evitar que la crisis se convierta en una "excusa para que las empresas recorten sus plantillas".
Así lo manifestó en rueda de prensa la presidenta de la Asociación, María Ángeles Samperio, quien presentó los actos conmemorativos de la festividad de San Francisco de Sales, patrón de los periodistas.
Samperio se refirió a la situación de los medios de comunicación cántabros, y explicó que la Asociación está realizando visitas a los mismos para "saber la realidad", en una ronda que ha comenzado con los periódicos y finalizará con las emisoras de televisión, "las que peor están".
"Lo que nos tememos es que al haber una crisis que afecta en todos los lados, cuando está mal el sector en sí, pueda ser más profunda, y utilizada por algunos empresarios, que ya está pasando", expresó Samperio.
La presidenta reiteró el ofrecimiento de la asociación como "mediadores" de forma que se puedan lograr "recolocaciones" y "soluciones" para los trabajadores afectados por despidos, ya que la asociación, pese a no ser un sindicato, se preocupa de los problemas laborales de los profesionales.
La presidenta de la asociación recordó la existencia de un observatorio nacional creado por la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) al que las autonomías envían información sobre la situación del sector.
También reiteró exigencias ya planteadas por esta entidad a la Administración, como que en la concesión de licencias para nuevos medios se valore la creación de puestos de trabajo, o que la publicidad institucional "sólo" vaya a medios que "respeten" la legalidad laboral, algo a lo que los políticos suelen mostrarse "reacios", apuntó.
Algunas de estas cuestiones ya se han trasladado en reuniones a representantes políticos, como el consejero de Presidencia y Justicia del Gobierno de Cantabria, Vicente Mediavilla; y el alcalde de Santander, Íñigo de la Serna.
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