La Consejería de Economía y Hacienda previó ayer contracción del crecimiento económico del 1,6 por ciento y la destrucción de 120.000 empleos en 2009, tras revisar las previsiones realizadas con anterioridad como "consecuencia del recrudecimiento de la crisis mundial".
En una nota, la Administración regional indicó que se ha revisado el escenario macroeconómico de Andalucía, elaborado en octubre de 2008 e incluido en el Presupuesto de la Comunidad Autónoma para 2009, teniendo en cuenta el "empeoramiento" de la actividad económica en los últimos meses del año hace "necesaria" que, para 2009, se prevea una contracción del crecimiento del -1,6 por ciento, en línea con la previsión nacional.
Según añadió, esta revisión del escenario macroeconómico encuentra justificación en el "recrudecimiento" que la crisis mundial viene registrando desde octubre, y que ha llevado a los organismos internacionales y nacionales a realizar revisiones a la baja de sus previsiones económicas.
Con carácter global, estas estimaciones señalan una desaceleración de la economía mundial en 2008, "significativamente más intensa que la inicialmente esperada, y un agravamiento en 2009, que puede llevar a los principales países industrializados a una situación de recesión".
Así, en 2009 previó que el Producto Interior Bruto (PIB) alcance, en términos nominales, un nivel similar al esperado en 2008, con 153.605 millones de euros, mientras que en términos reales, se estimó un descenso del PIB del 1,6 por ciento, en contraste con el crecimiento previsto con anterioridad del uno por ciento.
"Este descenso se traduciría en una destrucción de empleo, con una reducción de la población ocupada, en el conjunto del año, en torno a las 120.000 personas", informó la Junta.
En este sentido, la Administración andaluza matizó que el retroceso de la economía andaluza previsto para 2009 vendría explicado, por el lado de la oferta, en una contribución negativa de todos los sectores, salvo los servicios. Por el lado de la demanda, al mayor retroceso de la inversión se le uniría el del consumo, de forma que la demanda regional pasaría a tener una contribución negativa en el PIB andaluz, mientras que las relaciones con el exterior tendrían una aportación positiva, al igual que en 2008.
En este contexto, en 2008, se prevé un crecimiento nominal del PIB de Andalucía del 4,3 por ciento, con el que alcanzaría la cifra de 153.605 millones de euros. En términos reales, el crecimiento previsto es del 1,1 por ciento, tres décimas inferior al estimado en el pasado mes de octubre. Este menor crecimiento de la economía andaluza se traduciría en una reducción de la población ocupada que, por término medio, será inferior en 61.000 personas al nivel de 2007.
En el ámbito de la oferta productiva, este menor crecimiento se debe a la caída de la producción de los sectores industria y, especialmente, construcción, superior a la inicialmente prevista. En el ámbito de la demanda, por un ajuste de su vertiente interna, especialmente del componente de la inversión.
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