La dirección de Volkswagen Navarra ha anunciado al comité de empresa un recorte en el programa productivo para 2009 de 7.800 vehículo en el modelo Polo A04, lo que significa que la producción se rebaja hasta el entorno de los 70.000 vehículos, informaron a Europa Press en fuentes sindicales.
No obstante, esta bajada de producción, justificada en la situación negativa del mercado, no significará que el grupo automovilístico presente un expediente de regulación de empleo, ya que esta mañana la dirección alcanzó un acuerdo con los sindicatos mayoritarios, UGT, CCOO y Confederación de Cuadros, para cerrar la fábrica durante doce días sin recurrir a un ERE.
De esos doce días, se agotarán los siete de la bolsa de flexibilidad correspondiente al año 2009. El cierre de estos días será el 20, 23, 24, 25 y 26 de febrero y 20 y 27 de marzo. Respecto a los otros cinco días de cierre, dirección y comité decidirán próximamente qué carácter se les dará. La dirección plantea que esos días de cierre sean el 6, 13, 16, 17 y 18 de marzo.
El delegado de CCOO en Volkswagen Navarra Txetxu Rodríguez señaló que el acuerdo es "positivo porque evista que se aplique una medida drástica como la del ERE" y al mismo tiempo valoró que las partes "se han dado un tiempo para estudiar las alternativas y ver cómo evoluciona la situación, a peor o a mejor".
Este recorte de producción está justificada en la bajada de ventas del modelo A04, el Polo que actualmente produce la factoría de Landaben. No obstante, en abril comenzará a producirse el nuevo modelo, el A05, que será el que concentre la mayor producción de Volkswagen Navarra en 2009 y para cuyo proceso de lanzamiento la dirección y los sindicatos han alcanzado un acuerdo por el que se asegura que no habrá un expediente de regulación de empleo.
El comienzo de la fabricación del nuevo modelo implicará un descenso de la producción durante su lanzamiento, pero la dirección decidió asumir el excedente que se generará en este periodo ocupando a los trabajadores con acciones formativas.
Precisamente, el sindicato LAB planteó a la dirección que pusiera en marcha acciones de este tipo para evitar que la fábrica cierre pese al descenso de producción y mostró su "preocupación" por la situación que se pueda dar tras el verano, cuando ya haya finalizado el periodo de lanzamiento del nuevo modelo.
El recorte de 7.800 vehículos en el programa de 2009 no es el único ajuste que ha hecho el grupo automovilístico en los últimos meses. La situación del mercado ha propiciado desde octubre otros recortes de producción que afectaron al programa de 2008.
En concreto, a principios de ese mes, la dirección de la multinacional anunció que no se producirían los 6.000 vehículos cuya fabricación había sido anunciada en junio. Apenas dos semanas después, adelantó un nuevo recorte de 6.750 coches, y posteriormente volvió a comunicar una rebaja de 1.200 unidades.
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