La multinacional Sony anunció hoy la presentación de un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) para 275 trabajadores de su fábrica de Viladecavalls (Barcelona), así como la congelación salarial para todos sus empleados del Barcelona Technology Center (Bcn Tec).
Además, a principios de 2009 transferirá las operaciones de logística de Bcn Tec a Sony Supply Chain Solutions Europe (SSCS-E), lo que supondrá la transferencia de 185 personas, que conservarán las condiciones salariales y laborales.
Sony argumentó en un comunicado que estas medidas son "necesarias para mantener la operación en Barcelona", y que tras su aplicación "Sony España mantendrá la viabilidad de la manufactura de televisores en BCN TEC a corto plazo y contribuirá al programa de reestructuración global de Sony Corporation".
Este anuncio llega "después de cinco meses de negociaciones con los sindicatos de trabajadores sin llegar a un acuerdo sobre el plan de viabilidad voluntario que aseguraría el futuro de la planta" de televisores LCD, según la dirección.
Sony ya planteó el 8 de diciembre la congelación salarial en la factoría catalana de Viladecavalls (Barcelona), una propuesta que enmarcó en la necesidad expresada por la directiva hace unos meses de llevar a cabo una reducción "importante" de costes en la planta que permita situarla al nivel de sus competidoras, especialmente frente a la fábrica de Eslovaquia.
Desde julio planteaba la necesidad de abaratar los costes de fabricación en Catalunya y advirtió de que de no encontrar el acuerdo para reorientar esta situación pondría en peligro 750 empleos de los 1.300 fijos de la plantilla, que también cuenta con más de 700 trabajadores temporales.
El presidente de la Generalitat, José Montilla, ofreció la semana pasada en Tokio su colaboración a la empresa ante la crisis, siempre que hubiese garantías de su apuesta de futuro en Catalunya.
Sony recortará 8.000 puestos de trabajo de su plantilla a nivel mundial como resultado de su plan de recorte de gastos, que contará con otras medidas como un ajuste de la producción, una reducción del nivel de los inventarios y la reducción de costes operativos.
A través de estas medidas, Sony espera establecer una estructura corporativa capaz de conseguir ahorros de costes anuales estimados en más de 100.000 millones de yenes (838,7 millones de euros) para el final del año fiscal que termina el 31 de marzo de 2010.
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