La empresa de alimentación Avicu de Guadalajara, cuyos casi 400 trabajadores llevan sin cobrar cuatro meses, "está valorando" presentar concurso de acreedores, antigua suspensión de pagos, aunque, "es lo último que quiere hacer un empresario".
Según dijeron fuentes del despacho de abogados que presta asesoramiento a los propietarios de Avicu, el dueño de esta empresa avícola, cuyo accionista mayoritario es Jesús María Saboya, "está haciendo todas las gestiones y esfuerzos para situar, tanto a la empresa como a los trabajadores, en la mejor situación posible".
Aunque desde este despacho han dejado claro que la decisión es "exclusivamente" de la propia compañía pese a que ellos marquen "estrategias legales", "el concurso no es algo que se pueda tomar a la ligera porque lleva aparejadas ventajas y desventajas, y lógicamente, tenemos que ver".
Las mismas fuentes han insistido en que desde la compañía no se ha dejado de "pelear en todo momento la posibilidad de obtener alguna financiación para poner al día salarios y poder tomar la decisión de suspensión para que la gente pueda estar en la situación mejor posible".
En cuanto a la decisión adoptada por los trabajadores de rechazar un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) durante un año para la mayoría de la plantilla, desde el mismo despacho se ha expresado respeto por la decisión aunque en su opinión "es incorrecta".
Consideran que la aceptación de este ERE hubiera tenido consecuencias más positivas, pero, "ahora nosotros lo que tenemos que hacer es movernos en ese escenario", agregaron las mismas fuentes.
"Desde el punto de vista económico a día de hoy, es el peor camino que podían tomar y así lo he trasladado en la mesa de negociación", puntualizaron.
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