UGT pide que las empresas desarrollen programas de salud en el trabajo incidan en la prevención del VIH/sida

El sindicato UGT pidió ayer que las empresas desarrollen programas de salud en el trabajo que integren tanto la formación como las actividades de prevención del VIH/sida, con el objetivo de lograr que tanto empresas como trabajadores perciban la enfermedad como parte del ámbito laboral, con motivo del Día Mundial de la Lucha contra el Sida que se celebró ayer.

De este modo, el sindicato ha emitido un comunicado por el que anuncia que continuará "velando para que no se produzcan situaciones de discriminación", incluida la práctica ilegal de algunas empresas de realizar análisis para la detención de VIH, como requisito indispensable para permanecer o acceder a un puesto de trabajo.

UGT considera necesario "proteger de una manera especial" a los trabajadores del riesgo de contraer esta enfermedad, sin dejar de luchar para que sus derechos no se vean vulnerados en caso de haberla contraído. "Debemos ampliar la capacidad de percepción de los trabajadores respecto al riesgo de contraerla", cita el comunicado, recordando que la mayoría de los más de 33 millones de personas que viven en el mundo con VIH/sida trabaja y tiene unas cualificaciones y una experiencia, cuya pérdida no puede permitirse ninguna empresa.

Según la Organización Internacional de Trabajo (OIT), muchos trabajadores no saben lo suficiente del VIH para protegerse a sí mismos, por lo que es difícil que se modifiquen conductas para atenuar el riesgo de infección. El cambio de conducta es una forma de educación participativa que anima a los interesados a comprender sus propias actitudes respecto al VIH y a evaluar sus propios riesgos, y que les motiva a modificar su comportamiento.

Para este sindicato, a través del diálogo y la formación se debe reforzar la capacidad de las administraciones y organizaciones sindicales y empresariales, para proteger a los trabajadores de esta enfermedad y atenuar su impacto en el ámbito laboral. Para ello, se pueden utilizar los centros de trabajo para la prevención, atención y asistencia, así como para vigilar que no se produzca la estigmatización y la discriminación de trabajadores por esta enfermedad.

Junto a ello, se debe informar para reducir las conductas que puedan suponer un alto riesgo y facilitar la derivación a los servicios sanitarios públicos para el acceso a pruebas, tratamiento, cuidados y medidas de apoyo, todo ello, con confidencialidad. La empresa debería contar con un programa de salud en el trabajo que integre tanto la formación como las actividades de prevención y actuación ante el sida. De esta manera, se percibirá tanto por la empresa como por los trabajadores, como algo que no es ajeno al ámbito laboral y su tratamiento implicará a ambos.

Por último, UGT recordó como algo básico el conocimiento por parte de todos los trabajadores, que "está expresamente prohibido la realización de análisis para la detección del VIH", por lo que ningún trabajador debe permitirlo.