El salario bruto mensual de los jóvenes murcianos menores de 35 años es de 994 euros, un 16 por ciento menos que en el resto de España, según se pone de manifiesto en el ‘Informe de Emancipación Juvenil de la Región de Murcia 2007’, que ayer presentó, en rueda de prensa, la secretaria confederal de Juventud Trabajadora de la Unión General de Trabajadores (UGT), Pilar Duce.
A la presentación del informe acudió, también, la directora del Instituto de la Juventud de la Región de Murcia, Verónica López; y el secretario de Acción Sindical y Negociación Colectiva de UGT Región de Murcia, Matías Muñoz, quien señaló que el estudio se ha realizado a jóvenes de entre 16 y 35 años en más de 200 centros de trabajo de la Región.
En este sentido, Muñoz precisó que la palabra emancipado "se utiliza en este estudio para designar a las personas que gozan de una independencia económica tal, que les permite crear una unidad familiar propia en una vivienda de su propiedad".
De este modo, para el responsable de UGT, el interés de este informe "no sólo radica en los datos reales y objetivos que se desprenden en relación con los problemas de vivienda y empleo, sino que, también, ofrece la visión de estos jóvenes acerca del entorno en el que viven".
Y es que, según el ‘Informe de Emancipación Juvenil de la Región de Murcia’, los jóvenes españoles se emancipan a la edad de 30 años y ocho meses; mientras que los murcianos lo hacen unos pocos meses después, alrededor de los 31 años.
Asimismo, el informe muestra que el 88,7 por ciento de los nuevos contratos realizados a jóvenes de 16-35 años, en el primer trimestre del 2007, fueron temporales; mientras que el 43,7 por ciento de los desempleados fueron, en el mismo año, menores de 35 años.
A la vista de estos datos, Muñoz señaló que "hay que realizar una mayor inversión en formación y política social para dignificar el empleo de los jóvenes y conseguir, así, que tengan unas mayores posibilidades de emancipación".
ELECCIÓN DE MURCIA POR SU SITUACIÓN ECONÓMICA.
Por su parte, Duce explicó que eligieron a la Región para realizar el estudio "por su situación económica, en la que coinciden varios factores importantes para el informe como son el precio de la vivienda, en donde Murcia sigue encabezando ese incremento; y los salarios, los segundos más bajos del país tras Extremadura".
Además, señaló que esta ralentización en la emancipación de los jóvenes "está creando una generación joven de trabajadores de segunda categoría, al incorporarse al mercado laboral en una situación de precariedad y desventaja; como muestran los datos del informe, que afirman que los jóvenes cobran un 35 por ciento menos que el resto de trabajadores".
Esta situación se ve agravada en el caso de las mujeres que, en 2006 y según los datos facilitados por la representante nacional de UGT acerca de la Encuesta de Estructura Salarial, tenían un sueldo bruto anual de 11.800 euros, a diferencia de los hombres que ganaban 14.467 euros, "es decir 300 más, por desempeñar las mismas tareas".
Asimismo, comentó que la tasa regional de abandono escolar en jóvenes de hasta 24 años se sitúa en un 30 por ciento, cifra que, en el caso de los jóvenes de hasta 16 años, se duplica respecto a la media nacional. "Este abandono escolar se vio motivado, en gran medida, por la situación de crecimiento económico anterior y en sectores como la construcción, al que muchos menores se incorporaron en forma de mano de obra poco cualificada".
Por su parte, López señaló que desde el Instituto de la Juventud de la Región de Murcia "estamos muy satisfechos con el estudio porque cuantas más herramientas utilicemos para conocer la realidad regional, mas y mejores podrán ser las actuaciones a realizar".
Finalmente, la dirigente del Instituto de la Juventud afirmó que en la pasada reunión que mantuvo con el director general del INJUVE, Gabriel Alconchel, "el presidente nacional alabó la labor que se está realizando en la Región de Murcia en tareas informativas y asesorativas con los jóvenes".
CONCLUSIONES Y PROPUESTAS.
El peso de los jóvenes en la Región de Murcia respecto del total de la población está por encima de la media nacional, aunque este dato viene contrarrestado por la vulnerabilidad de los murcianos que, también, está por encima de la media.
De este modo, en el ámbito educativo se constata una clara conexión entre la formación académica y la integración en la vida laboral activa. Concretamente, en la Región de Murcia existe, por un lado, una tasa de abandono escolar alta y, al mismo tiempo, es una de las comunidades autónomas con mayor proporción sin estudios.
Otro de los frentes abiertos para los jóvenes es la precariedad laboral puesto que su autonomía económica depende principalmente de las rentas provenientes del trabajo. Circunstancias como el empleo irregular, los bajos salarios y la temporalidad que impiden planificar a largo plazo cualquier tipo de inversión en vivienda.
Y es que, a consecuencia de un mercado laboral cada vez más exigente en cuanto a formación, cada vez son más lo jóvenes que tienden a prolongar sus estudios más allá incluso de los universitarios con masteres, estancias en el extranjero o estudio complementarios de idiomas.
Finalmente, se asiste a un proceso de devaluación de las titulaciones de Formación Profesional que, según Duce, "debería combatirse de nuevo a través de orientación profesional temprana y de una oferta educativa amplia y acorde con las demandas del mercado laboral, puesto que el estudio de una carrera universitaria no asegura, actualmente, un buen empleo".
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