La constructora sueca Skanska despedirá a 3.400 trabajadores en los países nórdicos como resultado de la bajada de la demanda de los mercados residenciales septentrionales, reducción que le supondrá a la firma un coste de 600 millones de coronas (57,8 millones de euros), informó la compañía.
Las reducciones afectarán especialmente a Suecia, donde la constructora despedirá a 2.000 trabajadores, seguido por Noruega (800 trabajadores) y Finlandia (600 trabajadores). La plantilla de la constructora asciende a 20.500 empleados en los países nórdicos y 60.000 en todo el grupo.
"Lamento que esta situación afecte a tantos empleados y a sus familias. Desafortunadamente, en la situación actual es necesario adaptar nuestra organización y nuestros gastos a un menor volumen de negocio en el mercado nórdico de la construcción", dijo el presidente y consejero delegado de la compañía, Johan Karlström.
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