Comienza hoy la huelga convocada por los sindicatos de la empresa SLAC, dedicada al suministro de combustible de aeronaves, con paros parciales de dos horas en cada turno y que se repetirá los días 27 de noviembre y 5 y 8 de diciembre ante el bloqueo del convenio colectivo.
El Ministerio de Industria ha fijado los servicios mínimos en el 50% de los suministros a vuelos internacionales, en el 100% del suministro de los vuelos interislas en Balearesy los que conecten la Península con Baleares, Canarias y Melilla y en el 50% de los vuelos nacionales, distintos a los que operen entre las islas, que publica hoy en el Boletín Oficial de Estado (BOE).
Los paros se realizarán en los centros de trabajo que SLCA tiene en toda España, de modo que afectarán a los aeropuertos de Valladolid, Vitoria, San Sebastián, Girona, Reus, Valencia, Sabadell, Albacete, el aeródromo de Castellón, Burgos, Palma de Mallorca, Ibiza, Mahón, Bilbao y Ciudad Real.
La huelga ha sido convocada conjuntamente por la Federación de Industrias Textil-Piel, Químicas y Afines de CCOO, la Federación de Industrias Afines de UGT y la Federación de Sindicatos de las Industrias Químicas de CGT.
El motivo fundamental de la convocatoria es "la negativa de la dirección de la empresa a mantener la retribución variable que se abona a los trabajadores en la actualidad, consistente en una paga que representa entre el 5% y el 10% del salario base", resaltaron.
Esta empresa está participada al 50% por Repsol y otro 50% por BP, fruto de la fusión de tres empresas anteriores, que no se regían por ningún convenio o pacto sindical. En el mes de marzo se inició una negociación para la firma de un convenio colectivo.
Los representantes sindicales resaltaron que "su actitud ha sido en todo momento dialogante, ya que las reivindicaciones realizadas combinaban la búsqueda de un acuerdo con la conciencia de que se partía de una realidad compleja que entrañaba dificultades y les obligaba a ser flexibles". En su opinión, la dirección de la empresa "no ha mantenido una actitud facilitadora, sino de menosprecio, ya que de una reunión a otra no cumplía los compromisos que en su momento íbamos adoptando", lamentaron.
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