El fabricante británico de motores para la aviación Rolls-Royce anunció ayer que recortará su plantilla entre 1.500 y 2.000 empleos en 2009, lo que supone una reducción del 4% de su plantilla actual que emplea a 39.000 personas, el 60% en el Reino Unido.
Estos ajustes obedecen a la primera fase de un programa de Rolls-Royce para adecuar el grupo a su capacidad, tras examinar las posibles repercusiones de las actuales incertidumbres económicas y los retrasos en los programas del A380 y del Boeing 787.
En un comunicado, la compañía indicó que aunque es aún pronto para especificar qué número de trabajadores y qué centros serán los afectados, se está valorando con los representantes de los trabajadores una propuesta de reducción de 140 puestos de trabajo en la cadena de montaje e instalación de Derby, con sede en Reino Unido, y que forma parte de su grupo de aeronáutica civil.
"Estamos decididos a mantener la previsión de reducción de costos y mantener nuestra competitividad cuando la economía mundial entra en un período difícil", aseguró el director ejecutivo de Rolls-Royce, John Rose.
Dicho plan, no tendrá efecto en la orientación financiera del grupo durante este año y en los gastos para 2009, ya que la compañía espera que sean compensados en el transcurso del año, como ocurrió en 2008.
Rolls-Royce anunció en enero que eliminaría 2.300 empleos durante 2008, dentro de un plan de eficiencia, cuyo programa completará ahora.
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