La Federación de Servicios de UGT Madrid amenazó ayer con movilizaciones si se mantiene el bloqueo de la negociación del convenio colectivo de Seguridad Privada, un sector que afecta a 25.000 trabajadores de la región.
Las patronales representadas en la mesa de negociación "vienen manteniendo una actitud de dilatar constantemente la discusión de los puntos principales de este importante convenio", señala el sindicato. El principal punto de conflicto se basa en garantizar el poder adquisitivo para los trabajadores en el nuevo convenio que tiene que entrar en vigor a partir del 1 de enero de 2009.
Según explicó a Europa Press el portavoz de Seguridad Privada, Rafael Saldaña, un vigilante de seguridad cobra 1.035 brutos/mes, una cifra que se queda en unos 900 euros después de impuestos. "La patronal nos está toreando porque queremos un incremento de los salarios equivalente al IPC, y subidas normales que, en realidad, están haciendo los clientes de las empresas de seguridad privadas pero que no se están repercutiendo sobre los trabajadores. Queremos, por lo menos, mantener su poder adquisitivo", explicó.
FES-UGT Madrid denuncia que las patronales vienen "incumpliendo sistemáticamente los calendarios de negociación" por lo que no "descarta convocar movilizaciones si no hay un cambio sustancial en la mesa de negociación".
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