El secretario general de UGT, Cándido Méndez, pidió ayer "políticas públicas de la administración central, en coordinación con las comunidades autónomas" que ayuden a superar la crisis económica en el sector del automóvil y en el industrial.
Méndez hizo estas declaraciones tras la reunión mantenida con el secretario general de la Sección Sindical de UGT en General Motors España, Pedro Bona, que le sirvió "para conocer de primera mano la situación actual" de la planta de GM en Figueruelas (Zaragoza).
Para Méndez las políticas públicas de ayuda al sector industrial y al Automovilistico deberían de girar en torno a tres líneas. La primera sería "aportar una línea de financiación e inversión" en Investigación, Desarrollo e innovación (I+D+i) "para mejorar el capital tecnológico", apuntó Méndez.
La segunda línea de acción, debe de "apoyar a nuestras empresas en su dimensión internacional", ya que en el caso de la planta de Figueruelas de General Motors (GM) "el 80 por ciento de la producción se vende fuera de España", de ahí que haya que "apoyar la dimensión y el papel de estas empresas en los mercados internacionales", señaló el secretario general de UGT.
"El último elemento sería contribuir a resolver los problemas de liquidez que están atenazando las empresas" de tal forma que "se puedan plantear inyecciones financieras", indicó Méndez, quien matizó que "no se trata de ayudas a fondo perdido", sino de medidas, como "producir demoras en el cobro de impuestos o establecer una línea de créditos blancos y préstamos retornables".
En este sentido, Méndez opinó que GM está teniendo problemas de liquidez, "por eso si se habilitara esta tercera línea de medidas, de forma urgente, se produciría un efecto fulminante para estabilizar la situación y mantener en buenas condiciones la actividad productiva".
En cuanto a la situación de la planta de GM en Figueruelas, Méndez señaló que "los trabajadores de GM han hecho todo lo que está al alcance de su mano para que la empresa supere problemas estructurales del grupo", por eso apuntó que "ahora se necesita una mayor implicación de los directivos, y las políticas públicas".
GM FIGUERUELAS
Cándido Méndez resaltó dos aspectos de la planta de General Motors en Figueruelas. El primero "es la incidencia que tiene GM en la economía de Aragón", ya que tiene en torno a 7.400 trabajadores directos, a los que hay que añadir 7.500 de empresas proveedoras y 18.000 de trabajo inducido. "Por tanto, entre empleo directo, proveedores y empleo inducido hablamos de 33.00 trabajadores", recordó Méndez.
Además, apuntó que GM supone casi el 50 por ciento de la potencia exportadora de bienes industriales de Aragón, "es una empresa que aporta equilibrio territorial y que general 60 por ciento del empleo femenino del sector industrial aragonés". "Hablamos por tanto, de una empresa que en términos de empleo, de capacidad exportado, de equilibrio territorial y en términos de género tiene una gran importancia para esta comunidad", concluyó Méndez.
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