La Federación de Asociaciones de Concesionarios de la Automoción (Faconauto) estima que la grave crisis que vive el sector comportará este año el despido de unos 18.000 trabajadores, en su mayoría comerciales, de la red de distribuidores de automóviles de toda España.
El presidente de la entidad, Antonio Romero, explicó ayer que la crítica situación que atraviesa el sector se ha cobrado ya unos 15.000 de los 170.000 puestos de trabajo que generan los concesionarios, en su mayoría pequeñas y medianas empresas que han ido despidiendo empleados "poco a poco, sin hacer demasiado escándalo".
Ante esta situación, Faconauto ha reclamado al Gobierno que adopte de manera urgente un paquete de medidas que permita "salvar" los empleos restantes y evitar que las empresas se vean abocadas a cierres y suspensiones de pagos. Sobre el origen de la situación que viven los concesionarios, Romero lo tiene claro: "La burbuja automovilística subprime ha reventado".
Los distribuidores, obligados a cumplir con los objetivos de ventas impuestos por los fabricantes, han estado comprando más coches de los eran capaces de sacar al mercado y vendiendo una cuarta parte de ellos "sin ganar dinero" y matriculándolos "sin necesitarlo".
Ello ha provocado que la red de concesionarios española, formada por unos 3.500 establecimientos, haya pasado de tener remanente de vehículos a "coleccionarlos". "Seguimos vendiendo un coche y comprando dos, y en vez de tener un stock de 60 días, tenemos de 120", ha señalado Romero, que ha precisado, no obstante, que algunas marcas industriales almacenan excedentes de hasta dos años.
Paros en Renault
Por lo que respecta a los fabricantes, Renault anunció ayer próximas paradas en las plantas españolas de Palencia y de Carrocería Montaje de Valladolid, dentro de las paradas programadas en diferentes factorías del Grupo en Europa como consecuencia de la "fuerte caída" del mercado europeo, de un 15%.
En un comunicado de prensa, Renault ha abogado por hacer frente a esta caída de mercado europeo con "una gestión rigurosa de los stocks" lo que ha llevado a programar paradas en diferentes factorías del Grupo en Europa. En concreto, en lo que se refiere a las plantas ubicadas en España la factoría de Palencia parará 14 días hasta final de año, "con la posibilidad de ajuste al alza o a la baja en función de la evolución del mercado", mientras que la de Carrocerías-Montaje de Valladolid lo hará 11 días para adaptar su producción a la demanda comercial.
Renault ha explicado que estas paradas se realizarán aplicando días de bolsa de horas o del expediente de regulación de empleo (ERE) vigente. Así, en el caso de la factoría palentina se parará el 20 y 21 de noviembre y del 24 al 28 del mismo mes y el resto de los días queda por determinar, al igual que en Carrocerías-Montaje de Valladolid, donde se parará el 21 y del 24 al 28 de noviembre. Además, están previstas otras paradas en diferentes factorías del Grupo como la de Dacia en Pitesti (Rumania), Flins (Francia) y STA (Francia).
"La decisión de parar las factorías se debe a la actual situación global del mercado lo que ha obligado a la empresa a realizar un seguimiento riguroso de los stocks de Renault durante el cuarto trimestre de este año", ha insistido la empresa en este comunicado en el que ha asegurado que este seguimiento de los stocks permitiría a Renault reducir el impacto en las finanzas de la empresa "y, al mismo tiempo, aumentar nuestra competitividad para afrontar esta crisis global del sector del automóvil en la que estamos inmersos".
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