El vicepresidente de Recursos Humanos de Seat, Ramón Paredes, anunció ayer que propondrá vincular los salarios a la productividad en el marco de la negociación del próximo convenio para 2009, ya que las previsiones del IPC a las que están ligadas los convenios "nunca se cumplen".
Paredes planteó que los salarios de Seat tengan una parte fija para todos y una parte variable en función de parámetros como la productividad o el descenso del absentismo, una propuesta que trasladará al comité de empresa cuando empiecen las reuniones para renovar el convenio colectivo en Martorell (Barcelona), que podrían iniciarse las próximas semanas.
En el marco de las jornadas de automoción que organiza la escuela de negocios IESE en Barcelona, Paredes invitó a los agentes sociales a iniciar conversaciones en este sentido e incluso apuntó la posibilidad de poner sobre la mesa la participación de la plantilla en los beneficios. "Estoy a favor totalmente de hablar de ligar salarios a productividad y, por qué no, de la participación en los beneficios, tal y como hacen otras empresas del grupo Volkswagen como Audi", aseveró.
Añadió que el hecho de que los convenios estén ligados a la inflación "no ayuda a ser competitivo", y señaló que España, por su situación en materia de costes laborales, debe tomar medidas estructurales para no acabar preguntándose por qué no se implantan más fábricas en el territorio.
El vicepresidente de Recursos Humanos rechazó la comparación con otros países europeos como Alemania o Francia, con costes más altos que los españoles, puesto que son las casas matrices de los fabricantes y, por lo tanto, donde están el I+D y la toma de decisiones. Señaló que la industria española debe buscar "ser más atractiva" para competir con los países del Este.
Para hacerlo, apostó por medidas como mejorar la formación, hablar de flexibilidad incluso "semanal" y reducir su absentismo, entre otras medidas.
En cuanto al absentismo, lamentó el incremento de los últimos años en Seat a pesar de haber rejuvenecido la plantilla "en un 40%" y situado la edad media en los 37 años. Abogó por "sensibilizar" a agentes sociales, administración y empresas para dar "más preponderancia a las mutuas de trabajo" a la hora de conceder las altas y bajas médicas a los trabajadores.
"No puede ser que cobre igual una persona que va cada día religiosamente a trabajar que aquellos que acumulan bajas" y son "profesionales del absentismo", insistió el responsable de Recursos Humanos del fabricante español.
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