Al menos una cincuentena de vuelos tuvieron que ser ayer cancelados y otros muchos sufrieron retrasos en los aeropuertos italianos a causa de la huelga de 24 horas anunciada ayer por un grupo de trabajadores "rebeldes" de Alitalia, según informaron los medios locales.
La compañía, que todavía no ha ofrecido datos oficiales, informó a través de un comunicado que a lo largo del día se vería "obligada a nuevas cancelaciones y retrasos" y que "muchos pasajeros" sufrirían "molestias y largas esperas".
El comunicado concretó que la compañía está intentando recolocar a los pasajeros afectados en "otros vuelos, siempre que sea posible". La sala de prensa ofrecerá información sobre el total de vuelos cancelados esta tarde.
Según los medios de comunicación locales, sólo en los aeropuertos de Fiumicino (Roma) y Linate (Milán) fueron cancelados 25 y 37 vuelos respectivamente, mientras que gran parte de los retrasos superaron la hora de espera.
A los retrasos y cancelaciones de ayer se suman las decenas registradas ayer. De hecho, algunos pasajeros tuvieron que pasar la noche en el aeropuerto romano.
La reacción del Gobierno fue contundente al obligar por orden judicial a los trabajadores huelguistas que fueran a trabajar. El ministro de Interior, Roberto Maroni, aseguró que no permitirá que la situación de ayer se vuelva a repetir. "La huelga salvaje es una violación de la ley", sentenció.
Por su parte, el ministro de Infraestructuras y Transportes, Altero Matteoli, advirtió de que los trabajadores que no se sometan a la ley y sigan haciendo huelga "entrarán en una situación de completa ilegalidad" y se las tendrán que ver con "normas de orden penal".
"El Gobierno no permitirá que una sigla sindical autónoma paralice los aeropuertos y, sobre todo, no permitirá que pretenda imponer su veto a una sociedad (financiera) que quiere invertir y que salva 12.600 puestos de trabajo", añadió.
UNOS 250 TRABAJADORES EN HUELGA
La huelga salvaje ha sido proclamada por el sindicato Cub, que representa a unos 250 trabajadores de los casi 17.000 empleados de Alitalia. De hecho, los sindicatos que hasta ahora se habían mostrado más reticentes rechazaron este tipo de movilizaciones improvisadas y pidieron a sus compañeros actuar con prudencia y respetando las leyes.
El sindicato Cub, que de hecho no participó en las negociaciones con los empresarios, rechaza el plan del Gobierno para reflotar Alitalia y, al igual que los demás sindicatos ‘rebeldes’ se ha propuesto obstaculizarlo.
Sin embargo, mientras los demás se mostraron partidarios de organizar huelgas dentro del margen de la ley, Cub y otros trabajadores inconformistas han preferido llevar a cabo acciones más contundentes.
Los comentarios están cerrados.