Cerámicas Sugrañes, empresa dedicada a la fabricación y comercialización de azulejos y otros productos cerámicos, presentará próximamente un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) para despedir a 80 trabajadores de su planta de Cerdanyola del Valles (Barcelona).
La empresa, que actualmente tiene 180 empleados, tiene previsto trasladar su producción el próximo año a una nueva fábrica en Tarragona dotada de nueva tecnología, lo que le llevará a prescindir de cerca del 45% de la plantilla, según han confirmado fuentes sindicales.
La compañía comunicó esta decisión hace unos días a los trabajadores, que aprovecharon la multitudinaria manifestación del pasado miércoles 5 de noviembre en Barcelona a favor de la ocupación y la industria para denunciar su situación.
Ya hace varios años que los trabajadores de Cerámicas Sugrañes saben que la planta de Cerdanyola tenía fecha de caducidad y que la producción se iba a trasladar a una nueva factoría en la comarca del Alt Camp.
En 2003, la compañía alcanzó un acuerdo con el Institut Catala del Sol (Incasol) para cerrar antes de cinco años el centro vallesano, ya que éste está situado en una zona destinada, según la Generalitat, a industrias limpias.
Sindicatos y empresa iniciarán en los próximos días las negociaciones para tratar de llegar a un acuerdo favorable a ambas partes antes de la presentación del ERE ante la sede del departamento de Trabajo de la Generalitat.
Los comentarios están cerrados.