Bruselas contribuirá con cerca de 123 millones de euros hasta 2013 a la integración de inmigrantes en España

La Comisión Europea contribuirá con un paquete de 122,9 millones de euros de aquí a 2013 a apoyar la integración de inmigrantes en España. El Ejecutivo comunitario aprobó ayer el programa plurianual del Fondo europeo para la integración de nacionales de terceros países relativo a España. Si se suma el presupuesto del Gobierno español destinado a apoyar la integración, el programa está dotado de un total de 161,7 millones de euros.

   El comisario de Justicia, Libertad y Seguridad, Jacques Barrot, consideró ayer que "con el lanzamiento de su programa plurianual, España ha demostrado su compromiso con la integración de los nacionales de terceros países". El programa español que le remitió el Gobierno ha sido el primero en recibir el visto bueno del Ejecutivo comunitario, según informó éste en un comunicado.

   España empleará este paquete en cuatro objetivos prioritarios. En primer lugar la ayuda se destinará a aplicar los principios comunes que marca la política de integración en el conjunto de la UE. En segundo lugar, al desarrollo de indicadores y metodologías de evaluación de los progresos en la integración de inmigrantes, así como al ajuste de las políticas y medidas pertinentes para facilitar la integración y facilitar también la coordinación del aprendizaje de este colectivo.

   En tercer lugar, el Ejecutivo español empleará su cuota del fondo en desarrollar políticas para la integración, incrementar la capacidad intercultural y financiar la coordinación en este campo con el resto de Estados miembros. Asimismo, utilizará la contribución comunitaria, en cuarto lugar, para el intercambio de experiencias, buenas prácticas e información sobre integración en los distintos Estados miembros.

   El Ejecutivo español financiará en 2008 proyectos destinados a la promoción de la participación de los inmigrantes; al diseño de un método de evaluación de las políticas de integración, así como proyectos destinados a la coordinación e intercambios de experiencias y buenas prácticas entre los distintos niveles de administración pública.

   En términos globales, el Fondo europeo para la integración de nacionales de terceros países en el conjunto de Estados miembros está dotado con un presupuesto de 825 millones de euros hasta 2013. El 93% de la cuantía de este fondo se reparte entre los Veintisiete atendiendo al criterio de solidaridad, en función del número de inmigrantes con permiso de residencia en el país, de manera que se tenga en cuenta "la carga compartida" de los flujos migratorios en la Unión Europea, explicó el portavoz de Justicia, Libertad y Seguridad, Michele Cercone, en rueda de prensa.

FINANCIACIÓN PARA PROPUESTAS TRANSNACIONALES

   Con el 7% restante de los fondos, que gestiona directamente la Comisión, se financiarán acciones del ámbito comunitario para favorecer la integración de inmigrantes. A finales de este año, el Ejecutivo comunitario publicará la convocatoria para recabar las propuestas de acciones comunitarias de los Estados miembros que podrán recibir subvenciones de Bruselas, tales como proyectos transnacionales para crear redes, proyectos piloto, campañas de sensibilización o estudios sobre integración en la UE.

   La Unión Europea dispone de cuatro fondos para apoyar la gestión de los flujos migratorios: el Fondo europeo para la integración de nacionales de terceros; el Fondo europeo para las fronteras exteriores; el Fondo europeo para el retorno y el Fondo europeo para los refugiados.

   Estos instrumentos de apoyo a la integración de la inmigración en la UE forman parte del Programa general comunitario de solidaridad y gestión de los flujos migratorios, cuyo objetivo principal es garantizar "un reparto justo de las responsabilidades de los Estados miembros" en la gestión integrada de las fronteras exteriores de la UE y al aplicar las políticas comunes de inmigración y asilo.

   Dicho programa pretende contribuir, pues, a permitir que los inmigrantes en la UE, con distintos orígenes económicos, culturales, religiosos, lingüísticos y étnicos cumplan las condiciones de residencia, facilitar su integración en Europa y contribuir a mejorar la capacidad de los países comunitarios a desarrollar y aplicar estrategias de integración en todos los ámbitos, incluido el sociolaboral.