El único concejal con que cuenta el PP de Hondarribia (Guipúzcoa), José Manuel Lizarraga, aseguró ayer que ha contemplado "varias veces" dejar el País Vasco, especialmente desde que sufrió un atentado que le dejó "bastante tocado" en 2001. "Sería un mentiroso si dijera que aquí estoy viviendo mejor que en otro sitio, pero hoy por hoy mi familia está aquí y yo tengo que seguir viviendo aquí", explicó en declaraciones a Europa Press.
Lizarraga publicó ayer un anuncio en un diario con el siguiente texto: ‘Concejal víctima del terrorismo busca trabajo compatible con escolta’. El concejal aseguró que estuvo un año en tratamiento psicológico tras el atentado que sufrió, pero optó por quedarse en Euskadi tras meterse de nuevo "en el día a día del trabajo del Ayuntamiento". "Es lo que me curó", aseveró.
ETA hizo estallar en abril de 2001 cuatro kilos de dinamita en la casa de la vivienda de su madre, Charo Dorda, por aquel entonces concejala popular en Hondarribia y que no se encontraba en casa, mientras que el propio Lizarraga (concejal del PP en Irún en aquel momento) sí estaba en el piso cuando se produjo la explosión. Este era el quinto ataque que sufría dicha familia hasta ese momento.
Lizarraga lleva desde junio del año pasado en la "ardua tarea" de encontrar un trabajo que sea "compatible con unos mínimos de seguridad". Según explicó, llevar escolta le obliga, tanto por él como por las personas que le protegen, a "no poder aceptar cualquier trabajo" puesto que hay que buscar "una protección o un edificio donde estar dentro".
El concejal, de 41 años y padre de dos hijos, aseguró que "si es difícil hoy en día encontrar empleo, más lo es si además se tienen unos hándicaps" como los suyos. "Se hace duro y la mayoría de los empresarios prefieren contratar a alguien sin escolta", aseguró.
En alguna ocasión se ha planteado dejar el ejercicio activo de la política aunque, finalmente, desestimó dicha opción porque "debería seguir llevando escolta".
CUALQUIER TRABAJO
Lizarraga es Licenciado en Económicas pero no rechaza ningún tipo de trabajo. "Por circunstancias he hecho otros trabajos y en todas partes he aprendido cosas", aseguró. Según afirmó, sabe "desde conducir un camión hasta manejar una carretilla elevadora" por lo que no tiene "problemas para trabajar".
En todo caso, prefiere no tener que trabajar en Irún. "Yo evito Irún porque aquí soy muy conocido", explicó. En alguna de esas empresas "a pesar de que todos los jefes de turno estaban contentos" con su trabajo se encontró con que "de repente al mes te dicen que no vuelvas". "En la ETT preguntas por lo que ha pasado y piensa mal y acertarás", concluyó.
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