Al menos, una docena de profesores de la Universidad del País Vasco (UPV) se encuentran eximidos de dar clase debido a las amenazas de ETA y su entorno, por lo que su actividad docente se limita a actuaciones externas, como supervisar cursos de post-grado.
Fuentes de la UPV informaron a Servimedia de que esta modalidad laboral en la universidad vasca fue introducida hace años debido a la presión que sufrían determinados profesores por parte del entorno de la banda etarra.
Las fuentes consultadas explicaron que, en estos momentos, hay al menos una docena de profesores vascos en esta situación. Esta cifra ha variado en los últimos años, ya que hay docentes que han abandonado el País Vasco.
En este sentido, las facultades más problemáticas son las situadas en el campus de Lejona (Vizcaya), en las que se imparten titulaciones como Bellas Artes, Sociología y Ciencias Sociales y de la Comunicación.
Además de los profesores exentos de dar clase, está el caso de los docentes que acuden escoltados a la UPV, de lo cual existen casos en facultades como la de Económicas.
En este sentido, el atentado de este pasado jueves contra la Universidad de Navarra, en Pamplona, ha tenido precedentes como el intento de asesinato de la profesora Edurne Uriarte a quien iba dirigida una bomba que ETA puso en un ascensor o el artefacto explosivo que la banda ocultó en el despacho de la profesora de la UPV Gotzone Mora.
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