La Federación de Asociaciones de Concesionarios de Automoción (Faconauto) solicitó hoy al Gobierno que ponga en marcha medidas "con carácter de urgencia" para garantizar la viabilidad y supervivencia de las 3.500 pequeñas y medianas empresas (pymes) del sector de la distribuidores de automóviles en España.
La patronal de los concesionarios españoles pidió al Ejecutivo que implemente una batería de medidas económicas, financieras, laborales y jurídicas para relanzar la actividad económica del sector de la automoción en España.
Faconauto explicó que la puesta en marcha de estas acciones se orientará a garantizar el futuro de las 3.500 pymes de las redes oficiales de distribución de automóviles y vehículos industriales, así como de los 150.000 puestos de trabajo que albergan actualmente.
PLAN DE ACHATARRAMIENTO.
Una de las medidas solicitadas por la Federación es el lanzamiento de un plan de achatarramiento del parque automovilístico, que favorezca, mediante subvenciones directas, la retirada de automóviles de más de diez años de antigüedad y de vehículos industriales de más de siete años, a cambio de la compra de un coche nuevo o seminuevo de hasta tres años.
La organización señaló que la puesta en marcha de esta medida permitirá la recuperación en hasta diez puntos porcentuales las ventas de automóviles en España, ya que actuaría como un programa incentivador que ayude a anticipar la decisión de cambio de vehículo de los compradores.
Por otro lado, Faconauto calificó de "prioritario" que el Banco de España "ejerza la supervisión y control necesarios" para que las ayudas financieras contempladas en el fondo de adquisición de activos de 30.000 millones de euros se conviertan en concesión de créditos para las pymes y para las familias.
Así, explicó que en la actualidad se financia el 100% de los vehículos almacenados por los concesionarios, así como el 80% de las ventas de turismos y el 100% de los vehículos comerciales e industriales. Por ello, resaltó que las restricciones de crédito "están agravando la caída de las ventas".
FLEXIBILIDAD LABORAL.
En otro sentido, la Federación pidió al Gobierno la creación de medidas de flexibilidad laboral para que las pymes puedan mantener su actual nivel de empleo y "no perder a los profesionales cualificados en cuya formación han invertido".
La patronal señaló que estas acciones se centrarán en la aplicación de los recursos que contempla la normativa laboral, entre los que se encuentran la solicitud de la suspensión de los contratos de trabajo necesarios o los despidos colectivos con veinte días por año trabajado, con un mínimo de doce mensualidades mientras se mantenga la caída de las ventas.
La organización apuntó que estas iniciativas evitarían "el despido masivo" de empleados, así como la destrucción de la estructura empresarial del sector de la distribución. Asimismo, apostó por la aprobación de una Ley de Contratos de Distribución "que regule claramente los derechos y obligaciones de los fabricantes y distribuidores".
Por todo ello, la Federación solicitó al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que mantenga una reunión con las principales organizaciones del sector, con el fin de informarle de la "difícil" situación que atraviesa la automoción en España y para proponerle medidas "urgentes" para su reactivación.
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