Treinta y tres años después del asesinato de Pier Paolo Pasolini, el hombre condenado por el crimen, Giuseppe Pelosi, volvió el sábado al lugar de los hechos para limpiar el entorno del monumento erigido a la memoria del célebre cineasta y escritor, informó el domingo la prensa italiana.
En libertad condicional desde 2005, Pelosi formó parte del grupo de jardineros, empleados de una cooperativa dedicada a la reinserción de presos, encargado de limpiar el rincón de la playa de Ostia donde el director de cine fue golpeado hasta morir, antes de que atropellaran el cadáver con su propio automóvil.
"Volver aquí me ha revuelto el estómago", aseguró Pelosi, apodado ‘Pino la Rana’, al periódico Corriere della Sera. De 50 años, tenía 17 cuando Pasolini murió, el 2 de noviembre de 1975. En 2005, Pelosi dijo que sólo presenció el asesinato. Su contrato con el Ayuntamiento de Roma vence el próximo 31 de octubre. "Espero que sea renovado. No quiero volver a hacer tonterías", afirmó Pelosi.
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