El sindicato USO instó ayer a la Junta de Andalucía a convocar una reunión de la comisión de seguimiento de los asuntos de Delphi que, como tarde, tendría que haberse celebrado el pasado 2 de septiembre, y confió en que el presidente del Gobierno andaluz, Manuel Chaves, "no va a jugar con el colectivo de ex trabajadores y sus familias" al "garantizar" que diez empresas estarán operativas en la Bahía gaditana "a finales de 2009".
Fuentes del sindicato explicaron a Europa Press que, actualmente, están "a la espera" de celebrar una reunión de la comisión de seguimiento, con el deseo de que se convoque "a la mayor brevedad posible" ya que hay "pendientes de resolver cuestiones de gran importancia" para el proceso de recolocación.
En este sentido, recordó a la Junta que en el I Desarrollo del Protocolo de Colaboración suscrito el 4 de julio de 2007 se comprometió a que dicha comisión se reuniría "de forma ordinaria cada tres meses para valorar y realizar el seguimiento de los trabajos realizados" y apuntó que el último encuentro tuvo lugar el pasado 2 de junio.
En cuanto a las recientes declaraciones de Chaves, que afirmó que diez de las empresas comprometidas se instalarían en la bahía "a finales de 2009 como tarde" e insistió en que cumplirá lo pactado para que los 1.500 ex trabajadores de Delphi vuelvan a estar activos en un año como máximo, USO esperó que "no caigan en saco roto".
Según los datos del sindicatos, de los "aproximadamente 2.000" trabajadores de plantilla fija, empresas auxiliares y eventuales afectados por el cierre de Delphi, a día de hoy, hay "209 con un contrato de trabajo". De ellos, 80 son indefinidos, 13 autónomos y 129 tienen distintas modalidades de contratación, aunque "todos han encontrado el trabajo por su cuenta".
CRÍTICAS A LA FORMACIÓN
En cuanto al proceso de formación de los afectados, previo a su recolocación, USO recordó que en la primera fase formativa recibieron "una formación muy básica y genérica" que para los ex trabajadores fue "muy insuficiente". Por ello, al finalizar, el sindicato reclamó a la Junta que la segunda fase fuese "más acorde a los requerimientos de las empresas" que se instalarían en la Bahía para paliar el cierre de Delphi.
En el mes de octubre, "por fin" conocieron la noticia de que SK-10 demandó formación para 90 desempleados de Delphi, y el sindicato mostró sus "discrepancias" con el proceso de selección, puesto que Altedia Creade "no consideró dar a conocer a los sindicato la selección de perfiles".
Por otra parte, hizo un llamamiento acerca de las últimas informaciones aparecidas en los medios sobre los cursos formativos, tildándolas de "manipuladas en algunos casos". A su modo de ver, situaciones de este tipo "perjudican gravemente la imagen de los trabajadores ante la llegada de posibles empresas".
Por ello, el sindicato reclamó que los trabajadores "no sean tomados como herramienta de nadie", ni para vender periódicos "ni para que los políticos consigan fines electoralistas". Finalmente, subrayó que los afectados constituyen "un colectivo que se esfuerza cada día en superar su salida de Delphi como trabajadores y conseguir, como alumnos, la reinserción laboral tras reciclarse en el proceso".
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