Trabajadores de la empresa Balay BSH de Zaragoza se concentraron ayer por la tarde en la plaza de España de la capital aragonesa en defensa de un "convenio sostenible" y en contra de la propuesta de la dirección de aumentar los salarios, durante los próximos dos años, "por debajo del coste de la vida", según indicó a los medios de comunicación el portavoz del Comité de Empresa, Javier Lahílla.
Según Lahílla, los sindicatos "serios y coherentes" en sus planteamientos y, con motivo de la crisis global, aceptan que el nuevo convenio colectivo de las plantas zaragozanas de La Cartuja y Montañana fije unas condiciones laborales para los 1.500 empleados de Aragón "por debajo de la media de las demás plantas", ubicadas en Navarra y Santander, pero "la dirección no ha movido ni un ápice sus planteamientos iniciales".
El dirigente sindical expresó su rechazo a la pretensión de la dirección de las plantas zaragozanas de eliminar la cláusula del convenio que permite a los empleados cobrar todo el sueldo durante las bajas por accidente o enfermedad, lo que el Comité interpreta como "castigar al que trabaja" y frente a lo que proponen "premiar al que no coge la baja".
Los sindicatos Comisiones Obreras (CC.OO.), UGT, OSTA, la Intersindical de Aragón y CSI continuarán movilizándose todos los miércoles en la Plaza de España de Zaragoza durante la negociación del convenio colectivo y realizarán, además, otras medidas de presión, como asambleas de trabajadores.
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