Trabajadores de las empresas Faurecia y Antolín ubicadas en Vigo y dedicadas a la fabricación de asientos para la automoción, se manifestaron hoy ante las delegaciones del Ministerio de Trabajo y la Xunta para mostrar su descontento con los Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) presentados por las respectivas empresas.
La movilización, convocada a partir de las 10.00 horas por el comité de empresa de Faurecia, empresa donde trabajan unas 500 personas, contó también con la presencia de empleados de Antolín (ya que ambas compañías trabajan en exclusiva para Citroën) y con el apoyo de CC.OO.
Así, más de un centenar de personas se concentraron durante unos 45 minutos ante la sede del Ministerio de Trabajo para denunciar que ‘la autoridad laboral no funciona como debería’ y, posteriormente, partieron hacia la sede de la Xunta, donde se ubican las delegaciones provinciales de las consellerías de Traballo e Industria.
En declaraciones a los medios efectuadas durante el acto de protesta, el presidente del comité de Faurecia, Rogelio Salgado, explicó que la empresa está ‘sufriendo el primer ERE’ durante los cuatro viernes de este mes y confirmó que ayer la empresa les presentó un segundo expediente de 14 días para la línea uno (en noviembre, diciembre y enero) y dos días para la línea dos (en diciembre). Una vez que la medida sea estudiada por los representantes de los trabajadores, comenzará a negociarse el próximo lunes.
Salgado aseguró que este caso es ‘la punta de lanza de la crisis’ y advirtió de que ‘detrás vendrán muchas empresas más’. Así, lamentó que la autoridad laboral autorizase el primer expediente regulador ya que los representantes de los trabajadores veían ‘bastantes soluciones antes de tener que llegar a eso’, al tiempo que recordó que, en lo que va de año, la empresa realizó más de 16.000 horas extra.
‘Vamos a pelear utilizando todo lo que la ley nos permita’ aseguró, al respecto de la negociación sobre el segundo ERE presentado al comité, y que está pendiente de negociación.
ANTOLÍN
Por su parte, el presidente del comité de Antolín, Roberto Souto, recordó que actualmente se está negociando con la compañía el ERE de 27 días y aseguró que esta medida ‘no es culpa de la crisis, sino de un planteamiento de la empresa’, para adecuarse al ritmo de producción de Citroën, que también ha efectuado recortes para los últimos meses del año.
En Souto aseguró que todos los años Antolín acumula una serie de días de débito que ‘no hay forma de recuperarlos’, por lo que consideró que la medida de un expediente para la regulación de los empleos ‘no es la solución’ para las circunstancias en las que se encuentra la factoría. Por ello, aseguró que a partir del lunes, como medida de protesta, los trabajadores comerán el bocadillo fuera de la planta.
Asimismo, explicó que en lo que va de año se han perdido unos 50 empleos en Antolín, cuya plantilla actual está en 110 trabajadores fijos y 19 temporales. En las actuales circunstancias, consideró que ‘a partir del próximo marzo ya no habrá eventuales’. CC.OO.
El responsable del sector de componentes de la automoción de CC.OO., Celso Carnero, manifestó su solidaridad con los trabajadores de las empresas donde existen ERE sobre la mesa y criticó que ‘a la delegación de Traballo no le importa firmarlos’ porque, dado que los trabajadores afectados pasan al paro los días en que no hay actividad, ‘se paga con la caja del INEM y no con la autonómica’.
Asimismo, recordó que el hecho de cobrar el paro supone un perjuicio para los afectados, al verse interrumpida la acumulación de esta prestación. Carnero insistió en que ‘no puede ser que quien pague la caída de la producción sean los trabajadores’, al tiempo que recordó que las empresas del sector ‘darán beneficios este año’.
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