Tras siete años de guerra, las fuerzas armadas estadounidenses han pagado en el último periodo fiscal cientos de millones de dólares para reclutar soldados y retener las plantillas de mandos y tropa.
Según estadísticas obtenidas por The Associated Press, el ejército y la infantería de marina pagaron casi 640 millones de dólares en el año fiscal concluido el martes para reclutar a la tropa.
Ambos ejércitos siguen llevando la carga mayor en las guerras de Irak y Afganistán, aunque los reclutas fueron atraídos con incentivos que pueden sumar hasta 40.000 dólares por cabeza. En total, los incentivos de reclutamiento y la promesa de miles de dólares más en estudios universitarios encarecieron las bonificaciones de ambos cuerpos militares en un 25% sobre los totales del año pasado, según The Associated Press.
El dinero, especialmente en tiempos de incertidumbre económica, ha demostrado ser un eficiente medio de reclutamiento, pese a que el número de muertes estadounidenses en Irak superó los 4.100 y aumentó la violencia insurgente en Afganistán.
En consecuencia, el ejército, la infantería de marina, la armada y la fuerza aérea alcanzaron sus metas de reclutamiento en el año fiscal. La fuerza aérea no aporto información sobre las primas de enganche.
"Este dinero ayuda a elevar la moral en la tropa, exclusivamente integrada por voluntarios", dijo el portavoz del ejército Paul Boyce. "Reclutamos no solamente al soldado o la soldado sino a su familia, y este dinero es importante para ellos".
Según las estadísticas obtenidas por AP, el ejército y los marines destinaron algo más de 500 millones de dólares a primas y fondos para el pago de estudios universitarios en el año fiscal de 2007, frente al total de este año de 640 millones.
Los reclutas reciben en general una parte de la prima de enganche cuando se presentan al entrenamiento básico, y el resto al incorporarse al servicio activo, cuando cumplen fechas de permanencia determinadas.
Los incentivos del ejército aumentaron de 443 millones en el 2007 a 547 millones este año, mientras que los de la infantería de marina pasaron de 66 millones a casi 90 millones.
El ejército incorporó a sus filas en el pasado año fiscal a 80.500 reclutas, superando el objetivo de 80.000. La Guardia Nacional y el Ejército de Reserva alcanzaron igualmente sus objetivos, la Guardia con unos 60.100 y la Reserva con unos 28.900.
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