El Comité de Empresa del Canal Isabel II, formado por representantes sindicales de CC.OO., UGT y CSIT-Unión Profesional, denunció hoy que la Dirección de esta institución está impidiendo en estos momentos la entrada de los trabajadores que intentan manifestarse en las oficinas centrales, situadas en la calle Santa Engracia, coincidiendo con una reunión del Consejo de Administración, con el presidente del Canal, Ignacio González, también presente.
El encuentro comenzó a las 11.00 horas y los trabajadores de la empresa tenían la intención de concentrarse en las oficinas centrales "como medida de presión y protesta" por el anuncio de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, sobre la privatización del 49 por ciento de la entidad y su intención, así, de sacarla a Bolsa.
Sin embargo, quedaron muy sorprendidos cuando al llegar a las puertas de estas oficinas, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad y los propios vigilantes de la entrada no permitieron el acceso a las instalaciones. El secretario en funciones de CSIT-Unión Profesional, Pedro Vázquez, explicó a Europa Press que dichos guardas tienen una lista con un número de personas cerrada y no permiten la entrada a los empleados que trabajan en instalaciones del Canal fuera de las oficinas centrales, es decir, técnicos, servicios de inspección, instalación, entre otros.
"Tenemos derecho a manifestarnos pacíficamente, que es lo que estamos haciendo", indicó Vázquez, quien señaló que aunque tienen pitos, sirenas y banderas, son una muestra más de su desacuerdo con la decisión del Gobierno regional, al que insta a que cumpla el mandato constitucional y permita a los trabajadores de esta institución manifestarse abiertamente contra su decisión "equívoca".
En este sentido, apuntó que el tratamiento que están recibiendo es "excesivo". "Se nos niega la información por miedo a que boicoteemos las decisiones, y, además, no nos dejan manifestarnos", añadió el secretario sindical, al tiempo que matizó que la empresa parece "un búnker" y que está cortando todos los accesos.
No es la primera vez que los trabajadores se manifiestan por este anuncio. De hecho, la pasada semana varios centenares se agolparon frente a las puertas de los nuevos teatros del Canal, y coincidiendo con su inauguración, mostraron su rechazo a esta medida que, a su juicio, empeorará la calidad del servicio del agua para los madrileños. Hoy permanecerán en la calle hasta que finalice el encuentro, aproximadamente hasta la hora de comer.
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