El consejero de Innovación, Ciencia y Empresa de la Junta de Andalucía, Francisco Vallejo, consideró ayer "absolutamente responsable" la decisión adoptada por la compañía andaluza Santana Motor, ubicada en Linares (Jaén), en cuanto a la presentación de un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) temporal que afectará a 350 trabajadores durante cien días en los próximos doce meses.
Vallejo, que visitó ayer las instalaciones de la empresa Vircell, en Santa Fe (Granada), señaló a los periodistas que el acuerdo, que ayer comunicó el consejo de administración de la compañía a su comité de empresa, tiene el objetivo de conseguir que su capacidad productiva sea "equivalente" a la demanda actual, que ha disminuido un 30 por ciento a consecuencia de la crisis.
De esta forma, según apuntó, se evitarán para Santana unas pérdidas económicas "que el erario público no puede pagar". El consejero confió sin embargo en que la empresa, diversificada y "de futuro", pueda retomar la actividad normal en unos meses y trabajar "cada vez a mayor ritmo", de manera que se puedan contratar incluso nuevos empleados.
Vallejo se refirió a que la situación que atraviesa la compañía de Linares es similar a la que viven otras empresas del sector automovilístico, como Iveco o Ford y Santana, que prevé convertirse en privada, "no va a ser distinta". "La situación en estos momentos es la que es y no podemos cerrar los ojos", dijo el consejero.
Preguntado por si la decisión de la factoría afectará a las empresas auxiliares, Vallejo indicó que en Santana son "pocas", pero que, en cualquier caso, "todas las compañías del mismo sector tienen el mismo problema", teniendo en cuenta que el automovilístico es, después del de vivienda el más afectado por la crisis. "Se están ajustando las medias oportunas para ajustarse a las necesidades del mercado", reiteró.
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