El presidente de la Federación de Asociaciones de Concesionarios de Automóviles (Faconauto), Antonio Romero-Haupold, reclamó ayer más atención para el sector de la distribución, que acumula unos 200.000 vehículos en ‘stock’ y que prevé perder 15.000 empleos a lo largo de este año.
Romero-Haupold indicó a Europa Press que no entiende por qué se concede gran trascendencia a los anuncios de regulación de empleo en las fábricas de Ford o General Motors y ‘no se hace caso’ a la pérdida de un volumen de empleo diez veces superior en los concesionarios. ‘No se tiene la misma consideración’, subrayó.
En este sentido, recordó que las fábricas de automóviles cuentan con una plantilla conjunta en España de 70.000 trabajadores y pertenecen a multinacionales que, en algunos casos, anunciaron resultados récord al cierre del primer semestre, mientras la distribución aglutina 3.200 empresas ‘españolas’ con 170.000 empleados.
El máximo responsable de Faconauto acusó a los fabricantes de trasladar costes financieros a sus redes comerciales, especialmente en España, donde los concesionarios acumulan un ‘stock’ de 200.000 vehículos y son obligados por las marcas a seguir comprando, aunque no vendan, ‘porque las factorías tienen que seguir funcionando’.
De esta forma, el período medio de permanencia en ‘stock’ de los vehículos en las instalaciones de los concesionarios se ha multiplicado por dos, lo que genera unos costes financieros por intereses de 900 millones de euros, equivalente al sueldo de 50.000 trabajadores, según Romero-Haupold.
‘Nos siguen obligando a comprar coches, nos trasladan costes y exportan beneficios’, denunció el presidente de la patronal de los concesionarios, quien abogó por la elaboración de una ley del sector de la distribución para evitar estos abusos.
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