Más del 90% de los instaladores y mecánicos se muestran satisfechos con el papel que tienen en su empresa y con la calidad de las relaciones personales, según el estudio "Los factores psicosociales en el sector del metal y su influencia en el ámbito de la prevención de riesgos laborales" que ha presentado recientemente la Federación de Empresarios del Metal y Nuevas Tecnologías de la provincia tinerfeña (Femete).
Este trabajo, además, acaba de ser seleccionado "por su interés, calidad y singularidad" para representar a Canarias en las VI Jornadas Nacionales de Ergonomía y Psicosociología, que se celebrarán el 14 de noviembre en Asturias, según informó la asociación en un comunicado.
La investigación, que se llevó a cabo sobre una muestra de empleados del sector del metal, aplicando una metodología del Instituto Nacional de la Seguridad e Higiene en el Trabajo, ofrece "un buen balance, en líneas generales, sobre todo en materias como la calidad de las relaciones personales, su cometido dentro de la empresa, con su grado de autonomía en la gestión del trabajo y del descanso o con la distribución del poder de decisión entre el empleado y el directivo en lo relacionado con el desempeño del trabajo".
En el lado negativo, el estudio detecta que "el 24% de los encuestados se encuentra con una carga mental calificada de dañina para la salud, por lo que requieren una intervención en el plazo más breve posible para evitar problemas de insatisfacción, absentismo o estrés".
Conociendo esos datos, se propone un programa de actuaciones con doce medidas entre las que destaca "facilitar la información necesaria al trabajador; dar mensajes simples y concretos, teniendo en cuenta a quién van dirigidos y la formación y experiencia de los usuarios; y proporcionar las ayudas pertinentes para que la carga o esfuerzo de atención y de memoria llegue hasta niveles que sean manejables".
En esta línea, también se plantea "informar sobre la ejecución de la tarea de manera concreta y clara; aportar información al trabajador de rápida utilización; formar a los empleados sobre las tareas a desempeñar; y otorgar las tareas en función de la experiencia, conocimiento y formación".
Asimismo el documento señala que hay que "programar el volumen de trabajo y el tiempo necesario para su desarrollo; evitar sensaciones de urgencia y apremio de tiempo; establecer sistemas que permitan al trabajador conocer las cotas de rendimiento, la tarea pendiente y el tiempo disponible para realizarlo; rediseñar el lugar de trabajo, adecuando espacios, iluminación o ambiente sonoro; y establecer varios periodos de descanso cortos".
Los autores de la investigación recordaron que "la gestión de los riesgos laborales de origen psicosocial se puede considerar como la asignatura pendiente de la prevención. Sin embargo, la influencia de esos factores puede verse reflejada en alteraciones emocionales y de comportamiento, como el estrés, la ansiedad o la depresión, que sufren los trabajadores del sector del metal, así como sus problemas de insatisfacción, absentismo, bajo rendimiento, alto nivel de abandono o dolencias musculares o de huesos, especialmente en la espalda y extremidades superiores".
Tras la presentación del estudio, Femete ha recibido la felicitación del presidente de Acergo, Asociación Canaria de Ergonomía y Psicosociología, Jorge Ribes Febles, quien también confió "que en el futuro Femete continúe favoreciendo la realización de investigaciones en el área de ergonomía y psicosociología, en beneficio de los empresarios y empleados del sector del metal y de las nuevas tecnologías en nuestras islas, para lo que, sin duda alguna, puede contar con la colaboración de Acergo".
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