Los trabajadores de la compañía de piensos animales Ártabra han convocado una huelga indefinida que comenzará el 9 de septiembre y se prolongará "hasta que la empresa negocie en serio unas condiciones laborales dignas", según hizo público el sindicato UGT en un comunicado remitido a los medios. Los trabajadores tomaron esta decisión motivados por el conflicto laboral que arrastran desde hace casi un año con la directiva dada la "imposibilidad de llegar a un acuerdo en la negociación del convenio colectivo de la empresa".
Según explican fuentes del sindicato, la situación se ha visto agravada por dos modificaciones en las condiciones de trabajo que impuso la directiva "que obligan al personal de producción a trabajar sábados y festivos". Esas modificaciones ya fueron denunciadas en los juzgados de lo social y están pendientes de juicio, agrega el escrito.
Además, según fuentes sindicales, la empresa ha manifestado en varias ocasiones su intención de reducir los costes de personal para lograr un acuerdo, una postura que "de ningún modo" comparten los sindicatos UGT y CIG, presentes en el conflicto. "No es de recibo que, por un lado, pidan a los operarios que trabajen sábados y festivos y, por otra, recorten los salarios de los empleados nuevos", afirma Alberto Rodríguez, secretario general de UGT-Alimentación. Según Rodríguez, "es una pena que sea necesario llegar a este punto la primera vez que se negocia con la multinacional alemana Saria cuando con la anterior dirección nunca hubo problemas serios para llegar a acuerdos". En la misma línea se manifiesta Dolores Martínez, responsable de Alimentación de la CIG, que lamenta la actitud de la empresa y la emplaza a negociar "sabiendo que los trabajadores no van a retroceder en los avances sociales alcanzados". Además, la responsable del área de alimentación incide en que la vía de la solución está "en manos de la empresa
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