El estudio señala que en la actual coyuntura económica, uno de los aspectos que mayor intranquilidad genera en los directivos españoles es su falta de experiencia en la gestión de crisis. Esta escasa experiencia provoca que los directivos no sepan cómo afrontar una situación de crisis, lo que lleva a las empresas a situaciones difíciles.
A pesar de que la mayoría de las empresas optan en estas circunstancias por reducir personal (aproximadamente el 80%), más del 50% confía en su equipo directivo a la hora de superar esta circunstancia. Sin embargo, en el 57% de los casos, existen serias desavenencias entre los directivos y accionistas.
Asimismo, una vez inmersos en una crisis, en el 77% de las empresas "hay lugar para el optimismo", según destaca el informe, que pone de manifiesto que en la mayoría de los casos se convierte en una herramienta "fundamental" a la hora de superarla.
El director de Improven, Eduardo Navarro, destacó que la gestión del orden y de los costes en tiempos de bonanza como si se estuviese en crisis ayuda a la hora de afrontar los momentos adversos cuando llegan.
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