En tiempos de crisis económica lo mejor es ajustarse el cinturón. O es, al menos, lo que ha decidido hacer Telefónica. La multinacional que preside César Alierta redujo en el primer semestre del ejercicio un 12,3% la remuneración de su Consejo de Administración, que supone una cantidad de hasta 13,4 millones de euros.
Aunque la retribución fija se incrementó ligeramente, un 1,8%, llama especialmente la atención la caída de la variable, que se recorta más de un 20%.
Y eso que en la partida correspondiente a este año se incluye una remuneración adicional relativa al Programa de Incentivo Extraordinario en Metálico, cuyo pago, realizado el pasado mes de marzo, estaba vinculado al cumplimiento de una serie de objetivos de negocios, establecidos a nivel del grupo para el período 2005-2007. Pero el recorte final era inevitable.
Y es que aunque la operadora prevé cumplir con crecer sus deberes a final de año, en el primer semestre rompió su racha de mejora continua en los beneficios, tras 23 trimestres consecutivos al alza, y redujo sus ganancias el 6,2%. Entre enero y junio ganó 3.593 millones de euros, frente a los 3.830 del curso anterior.
Sustituciones en el Consejo
El Consejo de Administración de la empresa está integrada por un total de 17 miembros. El pasado 23 de enero se produjo, no obstante, un relevo tras la salida del máximo órgano ejecutivo de la operadora de Manuel Pizarro y Antonio Viana-Baptista, que fueron sustituidos por Eva Castillo y Luis Fernando Furlán. Ella es vicepresidenta de Merrill Lynch y él fue ministro de Industria en Brasil.
Pero al margen de la reducción en los sueldos del consejo, lo que más llama la atención en la información facilitada por el grupo a la CNMV es que la remuneración de los altos directivos -cuyo número ha pasado de cuatro a seis según el informe de gestión del primer semestre- se ha elevado desde 3,4 a 10,58 millones de euros durante dicho periodo de tiempo.
Además, Telefónica ha indemnizado con 8,58 millones a Antonio Viana-Baptista tras su cese en diciembre del año pasado como presidente de Telefónica España, la filial del grupo encargada de todo el negocio de la operadora en el mercado doméstico y que supone un tercio de la facturación del grupo. Viana-Baptista, que se marchó por "razones personales" y que fue sustituido por el consejero delegado de Telefónica de España, Guillermo Ansaldo, ha cobrado asimismo 3,28 millones de euros por su trabajo en la compañía durante el año pasado.
Javier Romera
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